Estas semanas hubo una intensa actividad en Zanon y el SOECN
Sí, fueron semanas intensas con muchos debates, discusiones y con pasos enormes dentro del sindicato y la gestión obrera. Primero cumplimos con un objetivo que teníamos desde que formamos la Lista Marrón y recuperamos el sindicato: reformamos los estatutos heredados de la burocracia sindical y los adaptamos a nuestro programa y práctica clasista. Nuestro estatuto es una herramienta para que use todo activista obrero para dar la pelea contra las direcciones burocráticas de la CGT y la CTA. Lo aprobamos hace 20 días en una asamblea donde hicimos ley la independencia de clase y la democracia obrera. El SOECN es independiente del estado y sus instituciones, de la patronal, de la burocracia sindical y de los partidos políticos patronales. En el SOECN la asamblea es el órgano máximo, incorporamos los cuerpos de delegados por sector, hay proporcionalidad en los cargos directivos y libertad para todas las tendencias que se reivindican de nuestra clase, los dirigentes que hayamos estado rentados durante un período tenemos que volver al puesto en la máquina, los mandatos son revocables. Cada propuesta y cada moción se debatió y se votó. En muchos casos por mayoría y minoría y en algunos otros por unanimidad.

¿Esto lo hicieron en medio de las amenazas en Zanon?
Así es. Nos pusimos una agenda de trabajo que, sin descuidar el conflicto, nos permitiera primero reformar los estatutos y después convocar a elecciones. Esto fue en medio de que el juez mantenía abierto el cram-down para que la vieja patronal vaciadora intentara retomar la fábrica. Zanon quería volver con una empresa fantasma que se llama Ocabamba y estaba pidiendo el desalojo. Esta situación llevaba a algunos compañeros a opinar que no era el momento de ir a semejantes cambios, la reforma de los estatutos y la convocatoria a elecciones. Pero habíamos hecho un compromiso y teníamos que cumplirlo: una nueva tradición clasista tiene que hacerse con programa y con hechos concretos.

Entonces reformaron los estatutos y fueron a la elección de la lista…
Con la fortaleza que nos da el nuevo estatuto fuimos a la asamblea de la Marrón para elegir los candidatos y definir la lista. Yo tenía la posición de no volver a tener un cargo en el sindicato y la idea de llevar adelante una renovación total de los dirigentes. Que volviésemos al puesto de trabajo y, desde ahí, seguir luchando y ayudando a forjar una nueva camada de activistas y dirigentes obreros. Pero por la situación del conflicto de Zanon los compañeros nos venían planteando a Alejandro López y a mí que teníamos que seguir a la cabeza de la comisión directiva. Así fue que en la asamblea de la Marrón expliqué que me parecía bien el criterio de los compañeros pero que para ir al hueso con los nuevos estatutos, en esta situación, lo mejor era que López rote de su cargo de Secretario Gremial a candidato a Secretario General. Se votó por unanimidad y el compañero López mocionó que yo fuera candidato a Secretario Adjunto para seguir con la línea de trabajo. Esto también se votó por unanimidad. Después se eligieron el resto de los cargos donde, cumpliendo con el espíritu del nuevo estatuto, se renovaron la gran mayoría de los compañeros, en algunos casos votaciones por ajustada mayoría, y se incorporaron compañeros de las cuatro fábricas. Se votó por mayoría el criterio de que hubiese representantes de todas las cerámicas en el secretariado. Esto era un déficit de la anterior lista ya que en aquel entonces apenas nos conocíamos con los compañeros de Cutral Có. Pero en estos años de mandato logramos la unidad de las cuatro fábricas y eso se refleja en la conformación de la lista. Como hicimos hace 5 años en Centenario votamos en asamblea a los candidatos de la Marrón. Y también en la lista, creo yo, han quedado reflejadas las distintas personalidades y posiciones que hay en Zanon.
La asamblea siempre fue el método desde que formaron la Marrón…
Siempre. Desde que formamos la Marrón para la Comisión Interna de Zanon le dimos mucho peso a la democracia obrera. La asamblea como método era el punto central del programa que nos unió en 1998. El resto del programa que hicimos para pelear contra la burocracia sindical de los hermanos Montes planteaba la unidad entre efectivos y contratados y que a igual trabajo hubiera igual salario. Nos oponíamos a los despidos y la rebaja salarial. Otro punto importante era que los dirigentes tenían que renunciar al cargo antes de irse de la fábrica porque teníamos una historia en Zanon donde los delegados arreglaban con la patronal y se iban con 30 o 50 mil dólares.
El sábado, en la asamblea de conformación de la lista, también tuvimos debate de más de una hora y media sobre el programa de la Marrón. Nos pusimos de acuerdo en reivindicar como programa todo lo actuado y la tradición de los años de la interna y directiva. El enfrentamiento a la patronal, el estado y los gobiernos provinciales y nacionales de De la Rúa, Duhalde y Kirchner. La confianza en nuestras propias fuerzas y del resto de los trabajadores. La unidad entre ocupados y desocupados y la coordinación regional y nacional, como la Coordinadora Regional del Alto Valle y el Encuentro Nacional de Trabajadores del 2 de abril. La lucha de Zanon y las huelgas en cada una de las fábricas. La libertad a los presos políticos y desprocesamiento de los luchadores. El periódico Nuestra Lucha y las resoluciones del último plenario nacional, donde llamamos a que se reúna la Comisión de Enlace, que hoy sería fundamental para conflictos como el del Garrahan, que se convoque al Segundo Encuentro y propusimos a los compañeros del Subte y demás organizaciones combativas e independientes de la burocracia, impulsar un gran periódico obrero nacional. Y, sobre todo, los nuevos estatutos del sindicato, que, no me canso de repetirlo, lo ponemos a disposición para poner en pie un nuevo movimiento obrero y sentar las bases de una nueva tradición clasista.
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“El juez decretó la quiebra y ahora se viene una dura pelea”

¿Cuáles son las novedades en el expediente de Zanon?
Unos días antes de la asamblea para elegir los candidatos nos enteramos que la Cámara de Apelaciones había declarado ilegal el cram - down y ordenado decretar la quiebra. El viernes 5 el juez acató la sentencia y decretó la quiebra. Esto significa que se abre la posibilidad del reconocimiento transitorio de la gestión obrera bajo la figura de la cooperativa FaSinPat. Se viene una dura pelea por el reconocimiento de la cooperativa. En la fábrica somos conscientes que se trata de una salida transitoria y que querrán imponernos condiciones. Para esto el juez nos amenaza con una orden de toma de posesión inminente que se puede efectivizar en cualquier momento ya que tiene habilitación de días y horas inhábiles. Junto a esto sufrimos un fuerte boicot de los proveedores y el ultimátum de corte del suministro del gas para fines de agosto. Pero en la lucha por el reconocimiento de la cooperativa no estamos dispuestos a ceder nuestra autonomía ni tampoco hacernos cargo de las deudas de la patronal. No aceptamos la injerencia de los jueces o los síndicos en nuestras decisiones y tampoco cargar con los costos del pasivo que dejó Zanon. Hace unos días volvimos a ratificar estos puntos en la fábrica y sacamos una declaración donde dejamos en claro cuál es la postura de los obreros de Zanon y el sindicato ceramista por una serie de mentiras que había publicado el PO en su periódico. Enfrentamos una nueva etapa que puede implicar un alivio transitorio pero sabemos que el norte está en la expropiación y estatización sin pago y bajo control obrero para poner a la fábrica al servicio de la comunidad. Este es el compromiso de lucha que tenemos los obreros de Zanon.