Nos presentamos en las elecciones a Centro de Estudiantes y el balance es muy satisfactorio. En Clave ROJA (PTS e independientes), junto a la agrupación Pan y Rosas y el colectivo de la Revista Cuestionando desde el marxismo, quienes integramos el “Bloque de Oktubre”, obtuvimos 316 votos, el 6,59 % y con esto conquistamos una secretaría en el Centro.
El Bloque tomó el ejemplo del frente Oktubre en Sociales de la UBA, proponiendo poner en pie un centro militante basado en la autoorganización, para terminar de una vez con los centros de gestión de la Franja, mediante la separación de los espacios de conducción política de los de la gestión propia; peleamos por la elección directa de las autoridades con el criterio “una persona = un voto” contra las camarillas académicas que sostienen este régimen universitario elitista; levantamos la necesidad de un cuestionamiento profundo a esta universidad de clases, impulsamos la lucha contra el pensamiento único y por un posicionamiento crítico frente a la universidad, planteando la necesidad de retomar las herramientas del marxismo, por eso elaboramos la revista Cuestionando desde el marxismo, para abrir el debate de ideas y que fue muy bien recibida tanto por estudiantes como por docentes y de la cual haremos próximamente su presentación oficial en la Facultad. Asimismo, impulsamos junto a Pan y Rosas la lucha por los derechos de la mujer, en particular de las mujeres trabajadoras, peleando porque estas temáticas tomen fuerza en la facultad, tanto en la organización como en los contenidos académicos.
Un aspecto que tenemos para resaltar, a diferencia de las demás corrientes, es que militamos estas propuestas junto a numerosos estudiantes independientes con los que nos venimos organizando en los círculos marxistas, demostrando que realmente somos una corriente militante y que contamos con un grupo importante de compañeros que están dispuestos a llevar adelante estas políticas y pelear por un movimiento estudiantil que se una a los trabajadores. 
En este sentido hicimos una crítica a la política de adaptación que lleva el EPA (PO, MST y el Brote), quienes sostienen el mismo Centro de gestión de bares y apuntes heredado de Franja Morada, sin generar participación y organización estudiantil alguna en tres años de conducción, dejando de lado la lucha por la democratización, adaptándose a la ideología conformista que se imparte en las aulas y dejando de lado la lucha por las ideas del marxismo todo lo cual se expresó en una campaña totalmente adaptada a la pasividad reinante en el movimiento estudiantil, y cuya consigna principal fue la de “fortalecer al centro”, limitándose escandalosamente a las demandas corporativas. Creemos que estos resultados muestran la potencia de las políticas de Oktubre para poner en pie a un movimiento estudiantil autoorganizado, clasista y militante, siempre que sean impulsadas en forma consecuente.