El martes 22 concluyó la toma de más de 100 días del rectorado y 6 Facultades de la UNCo, en lo que viene siendo una de las luchas más importantes del movimiento estudiantil. Varias asambleas de facultad votaron la propuesta del FER (Conducción de la FUC, independientes) de levantar la toma. Esto fue ratificado en la asamblea Interfacultades por 103 votos, aunque allí 80 compañeros votamos por continuar con la medida. El argumento del FER fue que la toma estaba “agotada” y que era necesario un “cambio de táctica”, ya que la dureza de las camarillas llevaba a una prolongación del conflicto.
 
Es necesaria la independencia del régimen universitario
Uno de los debates en el movimiento estudiantil fue sobre cómo democratizar la universidad frente a la crisis del régimen universitario. Desde En Clave ROJA exigimos que renuncien inmediatamente todos los funcionarios responsables de la crisis de la UNCo y planteamos la necesidad de convocar a una Asamblea Universitaria Estatuyente con mayoría estudiantil para refundar la Universidad y ponerla al servicio de los trabajadores, con el objetivo de enfrentar claramente a las camarillas que hoy gobiernan y mostrar una salida de fondo.
Por el contrario, la política del FER estuvo centrada en “presionar” al régimen para conseguir una “auto-reforma”. La dureza de las camarillas mostró crudamente que esta estrategia de presión, siempre presentada como la “posible”, se demostró impotente. El fracaso de la “presión” es lo que llevó al FER a plantear que la toma “no da para más”, y levantarla.
 
Hay que preparar las luchas duras
 La conducción de la FUC desde un principio se preparó para una lucha de “presión”, sin ver que, por su cuestionamiento al régimen, era una lucha dura. Por otro lado, desoyeron nuestra propuesta de hacer todos los esfuerzos para buscar la coordinación regional y la nacionalización. Por ejemplo, el FER rechazó nuestra propuesta de coordinar un Encuentro Nacional y un plan de lucha con los 50 Centros y 4 Federaciones que se retiraron del burocrático Congreso de la FUA en Mar del Plata. En lugar de esto, los esfuerzos estuvieron en “ganar voluntades” de los miembros de la Asamblea Universitaria.
Esto es lo que fue llevando al “desgaste” de la toma y del activismo, que igualmente demostró una gran fortaleza al sostener más de 100 días la toma, pese a las provocaciones de los “autoconvocados” y las persecuciones. Incluso supo enfrentar el intento de la CEPA de levantar por los medios, junto a los autoconvocados, la toma de Ingeniería.

La importancia de la autoorganización
Un punto de quiebre de un importante sector del activismo con la conducción de la FUC se dio al final de la toma, cuando el FER tomó la decisión política de levantar, sin importarle que la amplia mayoría de los activistas se oponían. Para esto se apoyó en el sector políticamente más desmovilizado del movimiento estudiantil, permitiendo además, votar a los “autoconvocados” para que se levante la toma. Incluso “el presidente de la FUC fue el encargado de dar la noticia del levantamiento anoche alrededor de las 21hs., a pesar de que todavía no se había realizado la asamblea interfacultades1,” sin esperar la votación.
Se levantó la toma pero la lucha contra las camarillas, por la democratización y la transformación de la universidad sigue, por lo que hay que mantener la conquista que son las asambleas por Facultad e Interfacultades para organizar el activismo, e impulsar delegados por curso con mandato de base. Para continuar con las medidas de lucha, las movilizaciones, impedir las elecciones de Consejo Superior, etc, y enfrentar las represalias contra quienes sostuvimos la toma. Al igual que durante la toma, desde En Clave ROJA, seremos incondicionalmente parte de cada asamblea y de cada medida de lucha, y seguiremos apostando con el debate y las propuestas a lograr una salida a la crisis de la UNCo, contra las camarillas y el régimen universitario, a favor de los trabajadores y el pueblo.

1Diario Río Negro, 23/08/06.