El Diario LA TARDE del 24/09/1917 en un Editorial titulado “La huelga en el Ferrocarril Pacifico “–Por la justicia y el derecho” da cuenta así del paro que comienzan ese día los trabajadores ferroviarios:

“Si existe en la Republica alguna causa justa, es, sin dudas, la que defienden los obreros del Ferrocarril Pacifico. La huelga, pues, es un derecho, y más que un derecho una necesidad.
(...) El gremio ferroviario tantas veces oprimido y constantemente explotado por los capitalistas de las empresas del riel , ha decidido sacudir el peso enorme que gravita sobre sus espaldas en forma de largas jornadas de trabajo para unos, de cortas y limitadas para otros , con la consiguiente disminución de sus miserables salarios , de vida antihigiénica y pésima, pletórica de zozobras y privaciones para todos , y ha resuelto solicitar el mejoramiento de su situación , presentando a las distintas compañías ferroviarias un pliego de condiciones, que consulta las aspiraciones más inmediatas de los trabajadores y empleados que en ellas prestan sus servicios (....) Sólo ha recurrido a la huelga cuando así se lo ha exigido la intransigencia de las empresas , siempre contrarias a conceder ni la más mínima mejora a los trabajadores, que con su esfuerzo elevan los dividendos de sus accionistas (....) la huelga tendrá necesariamente que adoptarse y a ello están decididos los obreros del riel si no se satisfacen sus legítimos anhelos, que no pueden ser mas justos y modestos (....) Las empresas que pretenden achacar a la crisis mundial , ocasionada por la guerra , la reducción de personal en sus líneas , con el consiguiente recargo para el que queda prestando servicios , ha realizado y realiza enormes ganancias , pero eso no le impide perjudicar a sus obreros y elevar la tarifa del transporte ”

En el mismo diario, el diputado socialista Ramón Morey denuncia que el jefe de policía ha manifestado que está dispuesto a hacer acribillar a balazos a los huelguistas en defensa de los intereses de la empresa.

La edición del mismo diario del 25/09/17 informa que los obreros siguen sin concurrir a su trabajo , que no circulan trenes de pasajeros ni carga , los talleres y oficinas están cerrados , custodiados por la policía y el Ejercito y habla de “tropas acuarteladas “ en previsión de desórdenes . El número de huelguistas de toda la línea Buenos Aires al Pacifico ascendía a más de 130.000. Y concluye que “el actual movimiento huelguista de los obreros y empleados ferroviarios es el mas hermoso y solidario de los que hasta hoy se han producido en el país”

El 26/09/17 los titulares ya dan cuenta de “Los sangrientos sucesos de ayer ” – “Triste Hazaña del Ejército , hace fuego contra el pueblo y mata dos mujeres, más de veinte heridos ” y denuncia que “....hace ya muchos días que la empresa del Ferrocarril Pacifico preparaba esta represión y al efecto contaba de antemano con el apoyo incondicional del gobierno radical, que puso a sus órdenes las fuerzas del Ejército y con el apoyo del Gobernador de la Provincia “....A continuación , explica así “los sucesos” : “ Hacia la una y media de la tarde
Más o menos un grupo de huelguistas se paseaba en actitud pacifica por las vías del ferrocarril a la altura de las calles Belgrano, Colón y Tiburcio Benegas . Entre los manifestantes iban mujeres, esposas e hijos de los huelguistas (...) Querían patentizar su solidaridad y su firme propósito de vencer y significar ante los ojos de todos, que los reclamos que hacían estaban íntimamente ligados a la vida de sus modestos hogares (...) Avanzaban hacia la estación del Ferrocarril Trasandino, cuando de pronto la voz airada de un oficial del ejército les ordenó hacer alto y sin que mediase mayores intimaciones sonaron varios disparos de máuser que se fueron repitiendo al extremo de poder afirmarse que fue un verdadero tiroteo. (...) ”
Una descarga cerrada deshizo la manifestación y hombres y mujeres rodaron por el suelo bañados en sangre.
La historiadora Fernanda Beigel relata: “La manifestación llevaba al frente una bandera argentina y otra roja. Al llegar a la calle Colón las tropas que estaban apostadas en las dependencias del ferrocarril abrieron intempestivamente el fuego contra los manifestantes. Una descarga deshizo la manifestación y algunos de sus integrantes entre ellos mujeres rodaron por el suelo. Las dos mujeres asesinadas eran las abanderadas, se llamaban Josefina Biandini de Gomez y Adela Montaña(1) . La primera recibió dos balazos en el pecho y uno en la boca. Una bala de carabina destruyó el cráneo de la segunda.” (2)

El mismo Diario citado del 27/9/17 da cuenta que más de 20000 personas pasaron por el sepelio de las victimas y que varios gremios como los del comercio, panaderos, lecheros, conductores de vehículos, motormans y guardas realizaron un paro de medio día en señal de duelo.

El cortejo fúnebre fue encabezado por un grupo de obreros con un letrero: “Protestamos de los horrendos crímenes del martes, que han sido un cobarde atentado a toda la sociedad” Por orden de la policía, tuvieron que retirarlo.

El 2/10/07 muere la tercera víctima de la represión, que había quedado gravemente herido, Miguel López, foguista, de 33 años.

El marco nacional presenta la primera presidencia radical del país. Durante estos sucesos el presidente era Hipólito Irigoyen. Durante su mandato (1916-1922) Irigoyen tuvo una doble política para el movimiento obrero, cooptación y represión. El movimiento más importante de la primera ola de protestas sociales que enfrentó, fue la huelga ferroviaria que se mantuvo con intermitencias desde junio hasta diciembre de 1917, con ecos al año siguiente, con diferentes luchas en Buenos Aires y las principales ciudades. Y sucedió poco más de un año antes de los sucesos conocidos como “La semana trágica”.

A nivel internacional, el triunfo de la revolución rusa en 1917 causa un fuerte impacto. Como parte de un ascenso que recorre vastas zonas del planeta, en Argentina la oleada de luchas tiene sus expresiones más avanzadas en la huelga general con características insurreccionales de enero de 1919, conocida como la Semana Trágica, en la ciudad de Buenos Aires que por entonces contaba con alta composición proletaria, y que culmina con centenares de muertos, detenciones y persecuciones, y desata luchas de apoyo en varios puntos del país; y las impresionantes luchas de los obreros rurales de la Patagonia (que Osvaldo Bayer inmortalizara en su libro “Los vengadores de la Patagonia Trágica”) y la huelga de los obreros de los quebrachales La Forestal, ambas a comienzos de la década del 20.

El Gobierno nacional intervino y el gremio ferroviario obtuvo algunas de sus demandas.

En Mendoza esta manifestación provocó la caída del gobernador Francisco “Pancho” ˜álvarez, que días después fue depuesto. (Diario Los Andes, 28/09/08)