El 25 de mayo de 1973, volvía el peronismo al poder después de 18 años de proscripción. Ese día asumió la presidencia Héctor J. Cámpora, que había conseguido un 50% de los votos. Una multitud se concentró en Plaza de Mayo, vitoreando a Allende, presidente de Chile y al presidente de Cuba. Después de 18 años de dictaduras y gobiernos ilegítimos, con cárcel y persecución, sindicatos intervenidos y con gestas como el Cordobazo y Rosariazo, que derrotaron definitivamente al Régimen Libertador, la masa trabajadora festejaba la vuelta de un gobierno que consideraban propio.
Pero no estaban dispuestas a seguir esperando. Los presos políticos por combatir a las dictaduras de Onganía y Lanusse seguían en cana. Esa misma noche del 25 en el porteño barrio de Villa Devoto una multitud y la militancia de izquierda marxista y peronista rodearon la cárcel y comenzaron a presionar sobre las puertas para liberar a los presos políticos que allí se encontraban detenidos.

Si bien la idea del flamante gobierno era remitir un proyecto de amnistía para su tratamiento inmediato por el Congreso Nacional, entrada la noche tuvo que ordenar la liberación inmediata de los presos que allí se encontraban, realizando apresuradamente una lista de los que consideraban iban a ser beneficiados por la amnistía proyectada. LA MOVILIZACIÓN LIBERO A LOS PRESOS, titulaba algun periódico de la izquierda.
El ascenso obrero y popular que comenzó en el Cordobazo del 69 se continuaba en esta acción. Cámpora asumía presionado por izquierda, Perón lo reprendió desde Madrid. Y decidió su retorno definitivo el 20 de junio. Ese día la derecha peronista con el aval de Perón provocó la masacre de Ezeiza. Veinte días después renunciaba “el presidente que no fue”, y se terminaba la primavera camporista.

40 años después ni el PJ ni los kirchneristas (ni siquiera algunos de los que fueron liberados aquel día) recordaron esa fecha. El Devotazo cuando la manifestación popular liberó a los presos políticos.