El gobierno de Néstor Kirchner se sacó la careta de “progresista” y despliega sus mecanismos políticos y jurídicos contra los trabajadores del Garrahan. Tres jueces han abierto expedientes penales. Kirchner despotrica que “son antidemocráticos y buscan réditos políticos”, mientras ordena a la policía extender sus guardias en torno al Hospital. No sólo medios como Canal 9 y Radio 10, sino hasta los periodistas “progres” siguen sin escatimar sus ataques contra las “salvajes” enfermeras. Días atrás, desde la “racionalidad sindical”, se sumó otra voz: la CGT de Moyano exigiendo levantar el paro, ya que “la situación no da para más”. Mientras que nuestro gremio: ATE y la CTA, continúan negándose a apoyar la lucha con medidas concretas y ni hablar del paro nacional, como exigen los huelguistas.

Desde abajo

Mientras por arriba llegan los aprietes, desde abajo los trabajadores están fortaleciendo su lucha. La asamblea se mantiene firme y la participación se extiende en calidad. El trabajo militante de información y agitación dentro del hospital es permanente, y esta semana aprovecharon unas jornadas de enfermería nacionales, acercándoles su voz. El Comité de Apoyo, que dirigen los trabajadores junto a organizaciones como los Cuerpos de Delegados de Subte, Astillero Río Santiago, LAFSA, Juntas Internas opositoras de ATE, las delegaciones ceramistas de Zanon, docentes y activistas obreros antiburocráticos junto a movimientos piqueteros, asambleas y partidos de izquierda está tomando un valor importante. Sus actividades se multiplicaron, extendiendo a la sociedad la lucha mediante actos, juntando firmas y campañas de agitación, como las realizadas días atrás en el Obelisco o en las estaciones de Retiro, Constitución y Once.

Si ganan, ganamos todos

La lucha de los trabajadores del Garrahan ha sacado a la luz la desidia y el cinismo kirchnerista sobre el derecho a la salud pública, a lo que se suman los reclamos por la educación. El presidente nada dice y todo calla sobre estos dos problemas sensibles a la población. Por el contrario, ataca violentamente a los trabajadores que la sostienen y luchan día a día por sostener servicios esenciales para el pueblo. Asimismo, el gobierno y los secuaces a sueldo del capital, golpean contra el derecho de huelga y la recomposición salarial, de 1.800 pesos, acorde a la canasta familiar. Por eso hoy para el movimiento obrero y el pueblo pobre la lucha de los trabajadores del Garrahan es de suma importancia: si ganan, ganamos todos; si pierden... perdemos todos.

Juntas opositoras

Frente a la negativa y pasividad de ATE, se reunieron este martes seccionales, Juntas Internas, Delegados y activistas opositores a la conducción de ATE en el Garrahan. En dicha reunión impulsamos un petitorio en apoyo y solidaridad, exigiendo a la dirección del gremio un paro nacional como votaron en asamblea los trabajadores del hospital y un plenario de delegados para discutir un plan de lucha nacional.
El compañero Raúl Godoy, Secretario General del Sindicato Ceramista de Neuquen, se hizo presente junto a una delegación de obreros de Zanon y donaron 200 mts. de cerámicos para el hospital, que dieron en custodia a la Junta Interna y a los familiares solidarios con la lucha.

Solidaridad y desafíos

La lucha va dejando sus enseñanzas y abriendo nuevos desafíos. Desde el PTS apoyamos con todo esta lucha, con pintadas, afiches, volantes, la venta de bonos y aporte de dinero para su fondo de huelga. Participamos activamente en el Comité de apoyo y sus actividades unitarias.
Los delegados del Astillero, que pertenecemos al PTS, junto a otros compañeros, impulsamos la participación de una delegación del Garrahan en una asamblea general de la fábrica, donde se votó el apoyo y la participación de una delegación en los actos en el hospital.
En el IOMA La Plata, logramos que una asamblea general vote el reclamo a ATE de paro en apoyo al conflicto.

Ganarse a la comunidad

Nuestros compañeros del Posadas estuvieron a la cabeza del paro solidario (ver artículo), en FOETRA Capital (que aportó al fondo de huelga) reclamamos que el sindicato impulse acciones, y así en muchos lugares. Los compañeros de Contraimagen pasan videos, y películas durante los días de huelga, con debates, filman el conflicto y lo proyectan en lugares públicos. En distintas universidades del país, mocionamos y conseguimos que los Centros de Estudiantes pongan dinero para la huelga, como los $1.500 de Filo, los $1.000 de Socio de la UBA, los $350 de Filosofía de Mendoza, y también en Tucumán. Los abogados del CeProDH se han puesto a disposición de los huelguistas. Estamos orgullosos de esta intensa actividad, porque estamos convencidos que la del Garrahan es nuestra lucha. Pero también intentamos contribuir aportando ideas e iniciativas para que el conflicto triunfe. Propuestas que sometemos a consideración de los protagonistas del conflicto. Desde este ángulo hemos insistido en que “la clave es ganarse a la comunidad”, dar una batalla por la “opinión pública” contra la campaña reaccionaria de Kirchner, todos los políticos patronales y los medios. Y que el apoyo que los huelguistas se han ganado entre los médicos y en especial entre los familiares de los pibes internados es necesario amplificarlo al conjunto de la población, haciendo todos los esfuerzos posibles (que siempre serán pocos frente a los recursos que cuenta la burguesía) para conseguirlo.

Apoyo a la huelga

Al mismo tiempo en el Comité de Apoyo venimos impulsando la necesidad de concretar la resolución de los trabajadores de instrumentar un Fondo de Huelga. En relación a esto es incomprensible la actitud de organizaciones de izquierda que hasta ahora retacean sus aportes. Pero más incomprensible aún es la actitud de los compañeros del MAS, que se negaron a aportar al Fondo de Huelga, con el increíble argumento de que no iban a financiar un video (sic). Esperemos que los compañeros revean su actitud, ya que para el triunfo se necesitan videos, volantes, afiches, solicitadas, etc. Es decir todo tipo de actividades que sin plata no se pueden concretar. Y fundamentalmente sostener a los huelguistas, en momentos que el gobierno anuncia que le descontarán los días de conflicto.

Comisión de enlace

La otra idea con la que venimos insistiendo desde el PTS es la necesidad de la coordinación entre los sectores que enfrentan la política del gobierno y se reivindican clasistas. En el Garrahan, la coordinación, organizada y extensa, está demostrando su potencialidad. Pero hay que reconocer que estaríamos en mejores condiciones si lo que votamos el 2 de abril pasado, en el Encuentro Obrero, la formación de la Comisión de enlace democrática se hubiera concretado. Seguimos insistiendo en la necesidad de una organización permanente que sea capaz de aglutinar a los sectores combativos y activistas que se encuentran atrapados por la burocracia y quieren enfrentar los atropellos del Estado y el capital.

(*) José Montes es delegado del Astillero Río Santiago y dirigente nacional del PTS