Las elecciones provinciales en Santa Fe del 24 de julio tuvieron un gran impacto a nivel nacional, destacándose la elección del candidato Midachi del PRO y la derrota resonante del kirchnerista Agustín Rossi, mientras que el Frente Progresista y el Partido Socialista retuvieron la gobernación por escasa diferencia.
Mientras los medios oficialistas tratan de disimular la derrota, las plumas de Clarín se exaltan con los votos cosechados por el cómico televisivo que "cerró" su campaña en el programa de Susana Giménez. De conjunto el resultado electoral muestra un voto continuista de la gobernación del PS, en sintonía con lo ocurrido en otras provincias, aunque también un voto fuertemente opositor (Del Sel) al gobierno nacional por parte de la burguesía y la clase media agraria, mientras que en la clase media urbana el voto se dividió entre una oposición moderada expresada en el voto a Bonfatti y un apoyo a CFK, desde el 22% de Rossi al 35% que sacó María Eugenia Bielsa, quien resultó ganadora como diputada provincial. Más allá de que intente polarizar con una "derecha creciente" el kirchnerismo, en su apuesta a reelegir a Cristina, se apoya en esta misma aspiración conformista de sectores de las clases medias (y de trabajadores) como se ve en el fenómeno del “voto cruzado”. Desde este punto de vista, aunque significó una importante derrota para el gobierno nacional, sobre todo en el sector rural, es prematuro decir que se ve condicionado un seguro triunfo de CFK en primera vuelta.

¿Qué sucedió en Santa Fe?

La provincia de Santa Fe la perdió el PJ a manos del PS en el 2007, después de haberla gobernado consecutivamente desde 1983. En esas elecciones Binner (53,88%) derrotó a Bielsa (42,89%), quien había ganado en la interna del PJ.
En las legislativas del 2009, luego de la disputa entre el campo y el gobierno, el PJ se presentó fracturado en dos listas: el reutemismo (Santa Fe Federal) y el Frente para la Victoria. En estas elecciones, en el cargo a diputados nacionales triunfó el Frente Progresista con casi 40% de los votos, quedando como segunda fuerza el Frente Santa Fe Federal por poca diferencia, que cosechó en cambio el primer lugar para el cargo de senadores con la figura de Reutemann (42,24%). El kirchnerismo sólo obtuvo escasos 9,57 % a diputados nacionales y 7,7% a senadores.
La performance del kirchnerismo en su momento de mayor crisis (2008-2009), como vemos, ya lo había llevado a una estrepitosa derrota en Santa Fe, sólo atenuada porque Rossi logró su reelección. Era difícil el objetivo de recuperar la gobernación, pero como mínimo se había puesto en marcha un operativo para intentar recuperar el espacio perdido para el kirchnerismo.

¿Todos unidos triunfaremos?

Desde el 2010 CFK sostuvo una política de acercamiento a los sectores agrarios que tanto había denostado previamente en sus discursos, y propuso al PJ santafesino llevar adelante un acuerdo con el antes "enemigo n° 1" Lole Reutemann. De esa política surgió el "pacto santafesino" para participar como listas internas dentro del PJ (evitando el escenario de dos listas peronistas) en las que compitieron reutemistas, obeidistas, kirchneristas, movimiento evita y mercieristas (por Mercier, ex ministro de hacienda de la Dictadura y amigo personal de los generales genocidas), todos por igual. De esa "competencia interna" surgieron listas unificadas del PJ santafesino con toda su variopinta pertenencia. El triunfador de las internas fue Agustín Rossi, acompañado por Jorge Hoffman de ATE como vice, quien junto a los sindicalistas de la CGT son responsables de llevar a los trabajadores detrás del PJ amigo de empresarios y sojeros.

Luego de triunfar en las internas Rossi hizo numerosos intentos para seducir el voto agrario y el voto peronista no K (reutemista y obedidista). Así se sacó fotos con todos los participantes de la interna (incluyendo al procesista Mercier), unificó campaña con María Eugenia Bielsa (K moderada, mejor vista por reutemistas y obeidistas) y acordó que el sojerísimo intendente de Rafaela, Perotti, derrotado en la interna, encabece la lista de diputados nacionales del PJ el 14 de agosto. A pesar de esta derechización de la campaña y de la buena performance de Bielsa (ganadora como diputada provincial y que subió el voto K en las grandes ciudades) Rossi sólo consiguió el 22,24% de los votos, saliendo tercero después de Antonio Bonfatti (38,74%) y Miguel Del Sel (35,17%).
Para “colaborar con esto”, pocos días antes de la elección Reutemann recordó en los medios que "nunca fue kirchnerista". Fue una muestra de lo precario del "pacto PJ" y un aval directo para que sus votantes viraran hacia Del Sel o para congraciarse con los que ya lo habían hecho. Por su lado, el sistema de boleta única por categoría (el elector vota con cinco boletas de colores, una por cada cargo a elegir, y en esa boleta se encuentran las fotos y nombre de todos los candidatos, sobre el que se marca con una cruz) hizo su parte y provocó enormes diferencias entre los cargos de un mismo partido. Así mientras Rossi quedó tercero muy por debajo de Bonfatti y Del Sel, la candidata a diputada provincial del PJ, María Eugenia Bielsa, fue la más votada con 34,70% contra el 32,84% de Raúl Lamberto (Frente Progresista) y 14,71% de Nicotra (dirigente peronista que emigró como muchos otros a las filas del PRO).
Estas diferencias también se vieron a nivel de las intendencias. Mientras Del Sel fue el candidato a gobernador más votado en la ciudad de Rafaela, la intendencia se mantuvo en manos del Perottismo, sector del PJ con llegada a Reutemann. Saliendo Del Sel segundo a gobernador, el PRO no ganó ni una sola intendencia, quedando todas en manos del PJ y el Frente Progresista.
Los militantes del Movimiento Evita gritaban "traidores" en el acto donde Rossi asumió la derrota y éste los llamó a silencio. Claro: el "traidor" Perotti, a pedido de CFK, encabeza la lista de diputados nacionales puesto por CFK y, más aún, lo necesitan ahora para las elecciones de octubre.

De este modo las elecciones santafesinas fueron una dura derrota del kirchnerismo ya que, a pesar de su intento de "recomponerse" de la mano del pacto con Reutemann, sigue recibiendo el rechazo electoral de los sectores agrarios de Santa Fe.
Lo sorprendente fueron los 612 mil votos del Midachi, que emergió con fuerza obteniendo 20 puntos más entre las elecciones internas del 22 de mayo y las generales del 24 de julio, exactamente el mismo porcentaje que perdió el PJ detrás de Rossi. A esto se le suman los votos que le sacó al Frente Progresista.
Previsiblemente, luego de las derrotas de Santa Fe y Capital, el gobierno y los medios k buscarán sembrar la idea de la necesidad de un “voto útil”, al “mal menor” frente a la derecha, cuando en realidad silencian que el kirchnerismo está plagado de sus “Del Sel”. ¿O acaso Scioli no es un famoso ex menemista, exitoso y derechista, igual que Macri, siendo una de las figuras k?

Frente Progresista… para los empresarios

El Frente Progresista retuvo la gobernación de Santa Fe, pero por escaso margen respecto a Del Sel, cayendo más de 10 puntos porcentuales respecto a las elecciones del 2007.
En esta ocasión más del 60 por ciento votó en contra del Frente Progresista. Durante los últimos cuatro años había gobernado con la cámara de senadores provincial liderada por el PJ, mientras que ahora ambas cámaras de la legislatura provincial serán opositoras. (Por el sistema electoral santafesino la primera minoría se queda con 28 diputados provinciales sobre un total de 50 y el resto se distribuye entre el resto de las fuerzas).
La escasa diferencia por la que ganó el candidato de Binner le puso paños fríos a lo que pretendían fuera un acto de lanzamiento con todo de la candidatura presidencial de Binner. Habían viajado especialmente para la ocasión Víctor De Gennaro, Victoria Donda, Stolbizer y otras figuras, pero dudaron si quedarse abajo del palco (hubo momentos que no se sabía si ganaban o no). De Gennaro, fundador y líder de la lista Verde de ATE, terminó bailando como en las quermeses macristas con globos y merchandising, con el patrón de los estatales santafesinos, y con el intendente de Rosario que se niega a erradicar el trabajo en negro.
La centroizquierda ya arrastra la crisis después de la ruptura entre Binner y Pino y no logra emerger con un candidato nacional que aglutine al espacio. La fragilidad del supuesto “modelo santafesino” adorado por De Gennaro y Clarín se puede ver en que el espacio que conforma el Frente Progresista Cívico y Social en Santa Fe está fracturado en dos candidatos presidenciales a nivel nacional (la UCR y el PDP con Alfonsín, el PS con Binner).
En el caso de Proyecto Sur y su candidato a diputado provincial, Carlos Del Frade, hasta el día domingo los resultados provisorios daban que había ingresado como diputado, con el 3,59% de los votos. Hasta último momento Proyecto Sur intentó una alianza con Binner y tiene como aliados estratégicos a los patrones de la Federación Agraria, por lo que no son ninguna alternativa para los trabajadores y el pueblo pobre, sino una nueva trampa de centroizquierda. El martes 26 de julio Del Frade denunció una maniobra fraudulenta de Binner (el elogiado reiteradamente por Pino) para dejarlo afuera de esta banca. De ser así nos disponemos a denunciarlo y enfrentarlo.

Una ofensiva del Frente de Izquierda hasta el 14 de agosto

A pesar de la polarización y del grave problema de ir separados el PO y el PTS (por imposición del régimen, que cerró el calendario provincial antes del cierre de alianzas a nivel nacional, por lo que no se pudo presentar el Frente de Izquierda) los partidos de izquierda hicimos una buena elección en las grandes ciudades y en el cordón Norte y Sur de Rosario.
A pesar de la polarización que impusieron los medios de comunicación, que hizo que la candidatura de Carlos Blanco del PO saque 0,64%, las fuerzas que conformamos el Frente de Izquierda en Rosario y Villa Constitución sacamos guarismos en concejales e intendentes que superan o arriman ambas fuerzas el 1%, y en general, sacamos entre los dos partidos el 1,5 % que el FIT necesita el 14 de agosto. Es de destacar la elección de la compañera Jogelina Signa del PO en Capitán Bermúdez, que sacó el 17% y salió electa concejal en esta localidad de 30 mil habitantes.
Cabe repetir que en estas elecciones no existió el FIT, como sí existirá en las elecciones a diputados nacionales (y presidente y vice, obviamente) del 14 de agosto, donde con la lista que encabeza Octavio Crivaro del PTS, trabajador de ANSES, junto a luchadores docentes como Edmundo “Muni” Filkenstein y Bibiana Picca, estatales como Loreley Fojo, metalúrgicos como Oscar “Chiche” Hernández y dirigentes como Juan Carlos Bernasconi, nos proponemos vencer la proscripción y llegar a miles de trabajadores y jovenes.
Tanto el PO como nosotros denunciamos el privilegio del que gozan los sojeros y empresarios en esta Santa Fe del PS y el PJ y que a los trabajadores nos ofrecen salarios de hambre, accidentes laborales, precarización. Con esos ejes debemos continuar una gran campaña del FIT.
Desde el PTS-Frente de Izquierda venimos impulsando una fuerte campaña militante en barrios, lugares de estudio y de trabajo. Los últimos días el PTS hizo un enorme trabajo de logística y militancia, para entregar a cada radio y canal de la provincia, localidad por localidad, los spots para la publicidad gratuita para hacer conocidas nuestras propuestas y candidatos. Apoyados en el aún reducido pero nada despreciable espacio que tiene la izquierda clasista en Santa Fe y en la llegada que tienen las fuerzas del FIT entre trabajadores, docentes, estatales y jóvenes, nos proponemos estas dos semanas hacer todos los esfuerzos posibles para conquistar voto a voto los alrededor de 25.000 votos que necesitamos para vencer el “piso proscriptivo” tanto para legislador, como presidente y vice. El relanzamiento de las agitaciones, la juntada de apoyos entre docentes y trabajadores, y la realización de un gran Acto de cierre, son algunas de las medidas que nos proponemos.