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Red Internacional

Los trabajadores convocan a una nueva acción en repudio de la represión y por la reincorporación de los despedidos. Será este jueves con una concentración en la puerta de la fábrica a las 7 hs, y marcha al Ministerio de Trabajo a las 18 hs.

Miércoles 29 de octubre de 2014

Este sábado se cumplieron 150 días del inicio del conflicto de Lear. Allá por mayo la empresa comenzó con las suspensiones, que luego se transformaron en despidos. Durante estos 5 meses, el conflicto de los “indomables” obreros de Lear se fue convirtiendo en uno de los más importantes de los últimos años. ¿Qué trabajador no lo ha mirado con simpatía, en qué burócrata sindical no ha despertado una mueca de desprecio?

El jueves pasado, la pelea por las reincorporaciones tuvo un hecho trascendente. El gobierno nacional decidió mostrar su sometimiento a la empresa yanqui ordenando una represión feroz sobre la Autopista Panamericana. El Carancho en Jefe de la Gendarmería, Carapintada (Retirado) Sergio Berni, ordenó el operativo. Los obreros y la izquierda están en su mira, tanto como los inmigrantes. El hecho generó el más amplio repudio, tal como diera cuenta La Izquierda Diario en su edición del viernes.

El día después de la represión, los trabajadores realizaron una conferencia de prensa donde aprovecharon para reunirse con decenas de organizaciones y personalidades que apoyan su lucha. Allí dejaron claro el mensaje, para quien quiera oírlo: “seguiremos luchando, si hace falta 150 días más”.

Con esa convicción, este lunes realizaron una nueva asamblea. Allí votaron las medidas para este jueves, y volvieron a denunciar que “la represión fue brutal, con saña y una violencia inusitada. El saldo de la represión fueron dos compañeros presos, más de cincuenta heridos, muchos de ellos hospitalizados e incluso hubo que intervenir quirúrgicamente a varios trabajadores. Esta violenta represión es funcional a los intereses de la multinacional estadounidense Lear, que junto con el SMATA y el aval del Gobierno no quieren que se resuelva el conflicto”.

Lejos de amedrentarse, los delegados en lucha cuentan que “hemos recibido una enorme solidaridad frente a la represión por parte de distintos sectores de trabajadores, de organizaciones políticas, estudiantiles y sindicales que se han acercado a manifestar su apoyo a nuestra lucha. Para repudiar la represión de la Gendarmería Nacional y para exigir una solución al conflicto convocamos a todos a concentrar el próximo jueves a las 18 horas en el Obelisco para marchar al Ministerio de Trabajo, en Avenida Alem”. El objetivo es que de una vez por todas se avance en las reincorporaciones de los trabajadores que siguen reclamando. Desde el inicio del conflicto, ya han sido reincorporados 61 trabajadores, y han podido ingresar los delegados a la planta. Como dicen una y otra vez: “no vamos a bajar los brazos hasta que no nos reincorporen, el gobierno tiene la llave para solucionar el conflicto”.

Además anunciaron que el mismo día, desde las 7 de la mañana, concentrarán en la puerta de la fábrica.

Está clarísimo el mensaje: los trabajadores y las organizaciones solidarias están dispuestos a seguir peleando para que no queden más familias en la calle. “Si hace falta 150 días más”, dijo uno de los despedidos.

Por si hiciera falta otra muestra: el fondo de lucha que impulsan para sostener el conflicto esta semana superó el 1.000.000 de pesos. Impresionante. Era uno de los objetivos que se habían puesto los trabajadores y quienes apoyan el conflicto, para que no los quiebren por hambre. Ahora van por más, porque la pelea sigue.


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