El martes 27 la burocracia de la UOCRA atacó a los ambientalistas que querían entrar a la sesión de la Legislatura, donde se rumoreaba que se
trataría el marco regulatorio para instalar la megaminería a cielo abierto en la provincia. Los patoteros, dirigidos por Mateo Suárez, eran más de 50
y golpearon salvajemente a los ambientalistas, llegando a realizar algunos disparos. La UOCRA “movilizó” más de 500 trabajadores en connivencia
con las patronales. La policía liberó la zona y desde las mineras y los gobiernos provincial y nacional se brindó la logística, con catering y baños químicos para el acampe en la Legislatura. Días atrás el gobernador Buzzi se reunió con Gerardo Martínez, buchón de la Dictadura y de la CGT oficialista, donde obviamente arreglaron la tercerización de la represión del 27. La UOCRA en Chubut tiene cientos de tercerizados, principalmente en Aluar y en el petróleo, y es el gremio con más desocupados, pero no planteó nada sobre este tema. La situación puede abriruna crisis política. El eco de la represión nacionalizó el conflicto. Si agregamos que la lucha contra la minería a cielo abierto es quizá el talón de Aquiles de los gobiernos, ya que es un tema muy sensible para la población, el gobernador está ante una encrucijada. Y hay que sumar la interna
peronista entre el dasnevismo y el kirchnerismo. Buzzi, que llegó al gobierno con los primeros, pero se pasó al segundo bando, no termina de ser aceptado por el 100% del kirchnerismo. En su primer año debió
enfrentar dos crisis policiales, el conflicto con Los Dragones y varias luchas gremiales. La lucha contra la megaminería muestra los límites del gobierno k, que recurre a lo más podrido de la burocracia para defender los intereses de multinacionales expoliadoras. Matías, que se hizo conocido
por una foto donde su campera blanca está toda ensangrentada por los golpes recibidos, cuenta los hechos: “nos vinieron a amedrentar, a causar miedo. Sólo queríamos participar de la sesión. Teníamos garantizado que íbamos a participar. Los matones nos avasallaron en la plaza. Recibo
un palo en la cabeza desde atrás. Me desvanezco y me levanto. Éramos entre 20 y 30. Comenzamos a retroceder y ellos empiezan a avanzar. Había zona liberada. Hubo complicidad del aparato político”. Es evidente el combo reaccionario formado por mineras, burocracia sindical, gobierno y Justicia. Lucas nos cuenta: “la fiscal dice que va actuar como fiscal. Pero Mac Karthy (vicegobernador) pidió en términos de ciudadano que no vayamos a Legislatura y que si la tratan en extraordinaria va a garantizar que 50 personas entremos de cada lado. Indirectamente dicen que la van a tratar en otro momento. Es una represión organizada contra el pueblo”. A este combo reaccionario se lo enfrenta con organización y lucha. Pero debemos luchar por una salida de fondo. El PTS plantea “por sindicatos sin burócratas; por un partido de trabajadores sin patrones; que la crisis la paguen los explotadores; no a la megaminería a cielo abierto y contaminante”.

ÚLTIMO MOMENTO

Más de 3000 personas marcharon por el “No a la Mina”

(30/11/12) Una impresionante y concurridísima respuestas de masas fue lo que se vivió en la tarde de ayer en Rawson en respuesta a la patoteada de la burocracia de la Uocra, comandada por Mateo Suárez, a ambientalistas el pasado martes 27 de noviembre. El intento de amedrentamiento al pueblo que lucha por parte del gobierno nacional y provincial, las megamineras multinacionales, la policía provincial y la burocracia sindical, fue impotente frente a la sensibilidad que despierta el rechazo rotundo de la mayoría de la publicación chubutense la megaminería a cielo abierto y contaminante. Las más de 3000 personas que nos hicimos presentes ayer en Rawson es una muestra de ello.

Como dijimos hace pocos días, este situación amenaza con abrir una crisis política provincial ante la urgencia que tiene el gobierno de aprobar el marco regulatorio minero, la feroz interna peronista y, principalmente, la tradición de lucha que hay en nuestra provincia en rechazo a la megaminería contaminante. Todo parece indicar que si el gobierno decide ir hasta el final con este tema, tendrá que recurrir a una sesión extraordinaria, ya que en principio no darían los tiempos para tratar la ley en las pocas sesiones legislativas que quedan, salvo que pretenda no discutirla y la apruebe sobre tablas, lo cual sería la gota que rebalse al vaso y genere una situación con final abierto y posiblemente convulsivo.

Todo parece indicar que el gobierno acusó recibo de la movilización de ayer y sabe que enviar matones y barras a provocar el genuino reclamo contra la megaminería alimenta más el odio hacia su desgastada gestión que aun no cumplió un año. A su vez, tiene sobre sus espaldas la presión del gobierno nacional de Cristina Fernández de Kirchner y sus personeros políticos en la provincia, el ministro de agricultura de la nación Norberto Yauhar y el diputado nacional Carlos Eliceche, entre otros, y sabe que de no ir hasta el final con este tema (todos sabemos que el gobierno nacional es el principal impulsor de la megaminería a cielo abierto en todo el país) le podrían cortar el envío de fondos a su gestión. A todo ello se agrega que el que viene es un año electoral, por lo cual una mala movida de fichas en este tema puede tener repercusiones en el electorado.

Mientras los de arriba se pelean para repartirse el botín o por ganar lugar en el escenario político, los de abajo debemos organizarnos para seguir esta lucha contra la megaminería a cielo abierto y derrotar los planes de las multinacionales y sus gobiernos. Desde el Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS) y la Juventud del PTS venimos participando en todas las movilizaciones y actividades contra la megaminería, pero sabiendo que es una de las tantas luchas que damos. En este sentido, además de militar por este tema, lo hacemos para darle una salida de conjunto a las clases explotadas y oprimidas del pueblo, porque sabemos que en los estrechos márgenes del capitalismo los triunfos de hoy se pueden perder con nuevos gobiernos capitalistas en el futuro. Por eso venimos planteando: “Por sindicatos sin burócratas; por un partido de trabajadores sin patrones; que la crisis la paguen los explotadores; no a la megaminería a cielo abierto y contaminante”.