logo PTS

Notas Relacionadas

LOS TRABAJADORES RURALES TAMBIEN SE ORGANIZAN

Mendoza: habla José Soto, delegado reincorporado de Campo Grande

Luego de la reincorporación, hay un nuevo ánimo y nuevos desafíos para los ajeros.

PTS

5 de junio 2008

Luego de la reincorporación, hay un nuevo ánimo y nuevos desafíos para los ajeros. La patronal de Adrián Sánchez, junto con la cámara de empresarios ajeros, adhirió al lock out patronal el pasado lunes en Mendoza. Sus obreros no se sumaron, por lo que Sánchez le pagó “el día” a sus colaboradores para que manejaran los tractores. Lejos de una “pueblada”, estos explotadores de niños y mayores, esclavistas del campo mendocino, comenzaron así su puja con el gobierno de Jaque, que busca defender las actuales condiciones de repartición de las ganancias del trabajo esclavo. Los obreros del ajo se organizan para fundar una organización sindical de ajeros y afines de Campo Grande, galpones y fincas de Rodeo del Medio (Maipú).

¿Qué significó esta reincorporación para los ajeros?

Cuando uno lucha, más que nada cuando hay resistencia, perseverancia en querer hacer respetar los derechos, las cosas se consiguen; así hayan quedado compañeros en el camino, hasta el hecho lamentable de la pérdida del compañero Erazo. Esas cosas nos han hecho pensar y tomar la decisión de seguir para adelante. El triunfo vale como cada uno de nuestros compañeros que han estado en cada momento. Fue una experiencia nueva, la estamos pasando todavía. Con esta experiencia queremos en este invierno organizar a todos los compañeros. Los compañeros de los ajos, la aceituna y los que quieran sumarse, queremos ofrecerles algo concreto, porque la necesidad es abundante, la gente no vive con el trabajo, sobrevive. Entonces lo que hemos pensado es hacer un sindicato. Con el apoyo de muchos sindicatos y organizaciones de Mendoza, eso es resultado de esta lucha. Esos empresarios del lock out patronal no mejoran las condiciones del trabajador; no hay baños, sombra, agua. Dicen que hay gente detrás de ellos, hablan en los medios de los costos, y que toda esa gente depende de ellos. Es lamentable porque en los hechos todos trabajamos en negro, en cooperativas truchas, ilegales. Y todavía salen a quejarse y decir que son del campo. Ellos no son del campo. Del campo somos nosotros que nos arrodillamos en la tierra, que salimos en esos veranos con 45 grados de calor en esos campos que no hay sombra, y en el invierno, salimos con lo que tenemos. Esa es la realidad del campo.

¿Qué era organizarse para ustedes, y qué es ahora?

Lo que hemos aprendido en el camino es mucho comparado desde el conflicto para atrás. Antes nuestra vida se tornaba en una burbuja, y esa burbuja era solamente el trabajo nada más, de lunes a sábados y esa era nuestra vida. Pero después hemos aprendido que la realidad no era como la pensábamos; fíjense en el gobierno, fíjense en los del sindicato, en los patrones, jefes, gansos. La verdad es que a esos señores no le interesamos nosotros. Por lo menos los que son de Campo Grande, todos deben estar concientes de esos tres puntos: la patronal no está con nosotros, no está el gobierno, no está el sindicato. Y acá si las cosas queremos cambiarlas la vamos a cambiar por medio de nuestro esfuerzo, de nuestra lucha, de nuestra unión. Esas cosas las hemos visto las hemos comprobado. Errores hemos cometidos desde que comenzó el conflicto, confiar en los del sindicato, después en los de la subsecretaría de trabajo y con resultados muy graves. A pesar de eso, los clasifico como “errores buenos” porque hemos vivido 15 años trabajando de esa manera, soportando las actitudes de las más peores que se puedan imaginar. Porque gracias a esos errores hemos aprendido que si se llega a armar algo más concreto con nuestros compañeros, lo vamos a intentar hacer con todos ya sabiendo que tales errores hemos cometido y no tenemos que volver a cometerlos.

¿Cómo ves a los trabajadores en la situación actual?

Hoy en día que estamos en medio de una crisis, yo creo que en la mayoría el bolsillo aprieta y de esa manera va tomando forma la conciencia. Se van viendo cosas que antes no se veían. Yo creo que el lado bueno de una crisis es que empieza a unir a la gente; a socializar y no al individualismo como antes. Va a ayudar a que tomen conciencia de las cosas, que hay que organizarse, y que puedan decidir los compañeros, que cada uno crea que es así, que cada trabajador tiene que hacer política. Este gobierno no quiere a los trabajadores, no les interesan. Mi reflexión es que si nosotros nos organizamos vamos a tener choques permanentes. Si no nos organizamos no vamos a tener choques y vamos vivir como toda la vida hemos vivido, y vamos a ver quizás en la tele accidentes, reclamos, represión, siempre lo mismo. La verdad es que va a ser algo duro, con esta crisis los que la vamos a pagar caro somos los trabajadores, no nos queda otra que afrontar la realidad e ir evaluando los movimientos y pasos a dar. Esas son cosas que vamos a tener que transmitir a todos los compañeros y esperar que se multipliquen los compañeros que estén decididos a luchar y conocer la realidad. Y si logramos una buena organización lo vamos a poder llevar adelante.

Prensa

Virginia Rom 113103-4422

Elizabeth Lallana 113674-7357

Marcela Soler115470-9292

Temas relacionados: