logo PTS

Casas Socialistas

Por el derecho al aborto libre y gratuito

11 de agosto 2005

En el exterior no hay nadie. Debe ser por el frío. Golpeo la puerta y atienden 4 chicas que andan por los 28 años. Amablemente, pero con voz firme (con actitud), piden una colaboración de 2 pesos, con la cual se participa del sorteo de un cuadro de Elisa Algranati, una artista local.
La gente que organiza es de la agrupación de Pan y Rosas.
En el interior no se siente el invierno y tanto la vestimenta como la música es poco usual para mis sentidos.
Algunas personas coexisten y parecen tener una conexión telepática. O simplemente una complicidad implícita. Aproximadamente 5 personas en cada uno de los ambientes de la vieja casa.
La bohemia moderna entra por todos los sentidos. Los sahumerios atacan el olfato. Las numerosas obras de arte llaman la atención por su connotación fálica y política. Haciéndolos uno. Hay pinturas, fotografías, esculturas, pintadas, serigrafías, videos temáticos, etc.
Kusturica y los Beatles son los más pasados por los grandes parlantes. Evocando recuerdos o inventando nuevos.
La cerveza fría que venden se encarga de dar una excusa para compartir y ser testigo ocasional de diferentes tipos de charlas. Por lo general distendidas y risueñas.
No falta el estímulo de ninguno de los sentidos. Del tacto, o mejor dicho, de cada uno de los capilares de nuestros brazos y nuca se encarga la música en vivo. Con gritos burlones, insanos y vociferaciones tranquilas o la mejor estilo clásico, “bicho bolita” hace sonar una guitarra acústica. Esta aparente desprolijidad es una forma no desconocida por los concurrentes. Son sus letras las que impactan y su aparente insanidad que espantaría a cualquier director sinfónico pero atrae a todo tipo de energúmeno alternativo que ronda esta noche este lugar.
Un lugar alternativo, sin duda. Pero, ¿alternativo a qué? A los espacios que abundan. Los temas de conversación son diferentes, la música es distintiva, así como la actitud de la gente. Las personas en esta reunión sonríen. Al cruzar las miradas con gente desconocida no recibimos una rápida finta y una esquivada. Hay un aparente y sutil interés en el que está al lado. Mirarse para reconocerse. ¿Para complotarse?.
Llegó mas gente. Ahora la mitad de ellos bailan al ritmo de los tambores en vivo, el resto charla o mira. Esto ocurre en el patio, una vez que baja la cerveza camino al baño encuentro una mesa con un petitorio por la legalización del aborto y una video afin.
Hoy es un espacio de recreación, cultura y encuentro. Otra de las caras de este lugar tan especial llamado Casa Marx.

Diagonal Alvear 276 - Neuquén
Tel.: 447-1269 - [email protected]

Prensa

Virginia Rom 113103-4422

Elizabeth Lallana 113674-7357

Marcela Soler115470-9292

Temas relacionados: