logo PTS

Neuquén

Reabrió Cerámica del Sur, gestionada por sus trabajadores

PTS Neuquén

13 de marzo 2009

Cerámica del Sur (ex Del Valle) es una fábrica de ladrillos huecos de más de 60 años, ubicada en Neuquén. Después de cuatro meses desde que la totalidad de los compañeros fueran despedidos en agosto de 2008 por cierre definitivo de la fábrica, arrancó la producción. La historia de lucha de los compañeros de esta cerámica se inicia en el año 2000, junto a los compañeros de Zanon por la recuperación del sindicato que en ese momento estaba en manos de la burocracia de “los Montes”.

En el año 2001 la patronal despide a todos los compañeros. A este ataque se responde con un acampe fuera de la fábrica y se logra, después de 6 meses, la reincorporación de todos. Pero la patronal, luego de tres meses, temerosa del ejemplo de los ceramistas de Zanon, mediante una maniobra ejecuta el vaciamiento de la maquinaria de producción y despide nuevamente a todos los trabajadores. Es aquí donde comienza la etapa más dura del conflicto, con una prolongada ocupación de la planta de más de seis años sin poder producir. Durante este tiempo se realizaron marchas, escraches, se trabajó un fondo de huelga y se juntaron alimentos, e incluso se resistieron dos intentos de desalojo. Esto fue posible gracias al apoyo y la solidaridad de organizaciones de desocupados como la juventud del MTD, que en ese momento integraba la Coordinadora Regional del Alto Valle junto al Sindicato Ceramista.

En el año 2007, con un alza en la industria de la construcción, la patronal reabre la fábrica con el nuevo nombre de Cerámica del Sur, pero tuvo que reincorporar a los trabajadores que se mantuvieron en la planta durante todos esos años y contratar más personal. A partir de este momento se sucedieron 2 años de permanentes conflictos por atrasos en los salarios, blanqueo de compañeros, reincorporación de dos despedidos, etc. En este tiempo, donde lo que predominaba era la incertidumbre, desde el Sindicato Ceramista la política fue combinar la experiencia de los viejos con el entusiasmo de los más jóvenes y fortalecer lazos de solidaridad con los sectores de trabajadores que salían a luchar y la comunidad. Así lo hicimos llevando nuestro apoyo a las luchas de los compañeros de: Casino Flotante de Bs. As., Cerámica Neuquén, Cerámica Stefany, Cerámica Zanon, Textil Mafissa, Werthein de Cipolletti, entre las más importantes. Al mismo tiempo, previendo ya en ese momento que la patronal podía cerrar la fábrica (fue lo que finalmente la patronal hizo) se incorporó junto a la demanda de defensa de nuestros puestos de trabajo la demanda de la mayoría del pueblo trabajador de Neuquén, que es la de exigir solución al gravísimo problema de la vivienda. De esta forma planteamos que “en una provincia en donde más de la mitad de la población no tiene casa propia, cerrar la única fábrica de ladrillos huecos de Neuquén Capital es un crimen”. Esta política dio resultado porque, cuando finalmente la patronal nos despide en agosto del año pasado, la respuesta de los trabajadores con los que compartimos asambleas, la calle y piquetes, fue instantánea. Se pusieron a nuestra disposición y se empezó a trabajar un fondo de huelga para nosotros.

En estos últimos meses, los lazos de solidaridad por parte de la comunidad se hicieron concretos en el apoyo de los vecinos del barrio Confluencia (donde está la Cerámica), autoridades y docentes de la Escuela 103 del barrio, que vieron la importancia de mantener la planta activa teniendo en cuenta la necesidad de viviendas de decenas de miles de familias.

Una nueva etapa en la lucha

Después de 7 meses de estar en la fábrica sin producir por estar cortado el gas y la luz, en agosto del año pasado fuimos despedidos. En ese momento comenzamos con guardias durante las 24 hs. Del día para resguardar las maquinarias de producción. Y se inició una larga negociación con la patronal que quería terminar de vaciar la fábrica. La negociación duró meses y dio como resultado un acuerdo mediante el que nosotros vamos a trabajar la fábrica durante tres años, con extensión por tres años más de forma automática, a cambio de una cantidad de ladrillos. Este acuerdo es un paso adelante porque después de resistir 8 meses de incertidumbre, sumado a todo tipo de maniobras de la patronal para quebrarnos, y del esfuerzo hecho por los 5 compañeros que vienen de soportar “todo” durante más de seis años de ocupación, cobrando sólo una quincena mínima, nos ubica en una nueva etapa en la que podemos gestionar la fábrica y el patrón se encuentra afuera. Sin duda, es en esta etapa donde podemos fortalecer lo hecho hasta ahora, como cuando hicimos una peña por la reapertura de la Cerámica junto a vecinos del barrio Confluencia, la comunidad educativa de la Escuela 103 y el Sindicato Ceramista, colmada de vecinos trabajadores y artistas que nos apoyaron.

Es nuestro desafió potenciar estas ricas experiencias para estar en mejores condiciones para afrontar las luchas por venir, que serán aún más duras, pero donde podremos dar una salida de fondo para Cerámica del Sur. Es en este mismo momento cuando se está desarrollando una crisis económica internacional, la más grande desde la gran crisis de los años ‘30, donde las patronales que durante más de 5 años tuvieron ganancias extraordinarias están tratando de descargar sus consecuencias sobre las espaldas de los trabajadores y la desocupación se empieza a convertir en la pesadilla de todos los trabajadores. Es importante conocer una lucha como ésta, donde a pesar de ser tan sólo 15 compañeros, con ayuda de del Sindicato Ceramista, nunca se aflojó. Y se ha sabido responder a los ataques de la patronal buscando siempre la coordinación con los trabajadores, la comunidad, y las organizaciones políticas y sociales.

Prensa

Virginia Rom 113103-4422

Elizabeth Lallana 113674-7357

Marcela Soler115470-9292

Temas relacionados: