El sábado 15 de noviembre se realizarán las elecciones a cuerpo de delegados de Señaleros de la Línea Roca (Argentren) y, por primera vez, luego de 23 años se presentará una lista de izquierda formada por trabajadores de base: la Lista Naranja Señaleros del Roca.

Como de costumbre, se presenta la oficialista lista Celeste, alineada a la CGT de Moyano con la intención de dar continuidad a su política de “hacer nada” ya que con Enrique Maigua como titular de la Asociación de Señaleros Ferroviarios Argentinos (A.S.F.A.) y su cuerpo de delegados, las condiciones laborales han empeorado, como sucede en el sistema ferroviario de conjunto, y su cuerpo de delegados siempre ausente ante los reclamos de los trabajadores. La Celeste tiene el control desde la privatización del ferrocarril, aproximadamente, con la exclusión de la entonces Directiva combativa y a partir de acuerdos con la bolsa de empleo. Desde esa época hubo una sola lista, porque la trampa residía en la obtención de candidaturas para formar una lista opositora, por la constante persecución a los trabajadores. Lo único que hizo fue ser parte de los paros nacionales convocados por Moyano, pero de manera pasiva ya que no llamaron a movilización alguna.

Además, en estas elecciones se presenta la lista Violeta con el objetivo de dividir los votos de la oposición. Alineada al kirchnerismo, se pronuncia por el regreso de Ferrocarriles Argentinos a costa de haber sido cómplice de la continuidad de la privatización del sistema ferroviario. Una forma de reivindicar la política de sus ministros amigos Carlos Tomada y Florencio Randazzo, quien culpa a los trabajadores del pésimo servicio que brinda el ferrocarril y nos impone más controles, cuando la realidad nos dice que la verdadera destrucción del ferrocarril es obra del pedracismo que hoy milita para Randazzo. La Violeta surgió hace unos años en el medio de la disputa por un cargo político en el municipio de Avellaneda: un sillón para dos delegados. Como el puesto lo obtuvo un burócrata de las 62 Organizaciones, el K rompió su pacto de amistad y de subordinación y formó la Violeta. Lo único que se les conoce es que carnearon los últimos paros nacionales.

Ni Celestes ausentes, ni Violetas “Karneros”: paso a la lista Naranja Señaleros del Roca

La lista Naranja tiene su origen en la previa formación de la Agrupación Naranja Señaleros del Roca, hermanada con la Agrupación Naranja Nacional Bordó del Roca. Tuvimos nuestro bautismo de fuego en el paro del 28 de agosto convocado por Moyano y sus aliados ocasionales pero, a diferencia de la posición tomada por la A.S.F.A. los señaleros de la Naranja no nos quedamos haciendo el asado en casa, sino que fuimos parte activa del paro participando en el corte del Puente Pueyrredón junto centenares de trabajadores y jóvenes que nos proclamamos en contra del plan de ajuste del gobierno de Cristina. Apoyamos, también, la lucha de los trabajadores despedidos de Lear, MadyGraf, Shell, Calsa y Honda como también acompañamos a Carla Lacorte en su incasable lucha contra el gatillo fácil.

Además, nosotros no esperamos a ser delegados para defender a nuestros compañeros y pusimos todo nuestro esfuerzo para reinstalar a los compañeros injustamente separados de servicio por la arbitrariedad de los controles de la empresa, algunos durante más de 5 meses.

Ya pasaron 23 años de la gran huelga ferroviaria del año 1991 llevada adelante por maquinistas y algunas seccionales de señaleros contra la privatización del sistema ferroviario que durante 45 días paralizó el país. Las condiciones laborales sistemáticamente han empeorado. Además, los delegados no nos representan ya que nunca están. Así es que desde la lista Naranja nos presentamos en estas elecciones, porque queremos recuperar el cuerpo de delegados para que esté al servicio de todos los trabajadores y apostamos a un cambio para que haya verdadera democracia sindical basada en asambleas y un cuerpo de delegados que pelee por nuestros derechos y reivindicaciones. Entre ellos está la reapertura de paritarias, ya que a nuestro salario se lo comió la inflación, la pelea por las seis horas de trabajo, la eliminación del impuesto al salario, la recategorización y la reincorporación de los compañeros separados injustamente del servicio.

Desde la lista Naranja proponemos un sindicato al servicio de los trabajadores y un ferrocarril al servicio del pueblo, como también la reestatización del sistema ferroviario bajo administración de los trabajadores y usuarios populares.