Lamentablemente los movimientos piqueteros dejaron entrever una degradación de la práctica política de algunos partidos de izquierda, como la CCC y el Polo Obrero.
Lo más grave quizás fue la mímica de prácticas, utilizadas en muchos encuentros por partidos como el PJ, que solía "llevar de paseo" a las mujeres desocupadas y de los barrios populares, alejándolas de los talleres, sólo para hacer número en las marchas. Y no sólo eso, han reproducido estos métodos al interior de los sindicatos, como SUTEBA La Plata, donde varias trabajadoras docentes, que asistían por primera vez al Encuentro, se vieron solas a la hora de ir a los talleres, ya que las direcciones de izquierda habían organizado tours por la ciudad.
Nos parece alarmante que corrientes que se reivindican de izquierda, como la CCC, y peor aún PO, reproduzcan los peores gestos clientelares.
Esta práctica tuvo su consecuencia política. A la hora de definir la participación de la izquierda en la marcha, PO y CCC definieron (cuando en los talleres, muchas mujeres de los movimientos piqueteros como el Polo Obrero apoyaban la moción de marchar contra la política represiva de Kirchner) marchar sin denunciar al gobierno, ni su política represiva, en pos de la supuesta unidad.