Finalmente la CGT de Hugo Moyano, la CTA de Pablo Micheli, a las que se suma la CGT de Luis Barrionuevo convocaron a una marcha el 19 de diciembre. El llamado es contra el impuesto al salario, la universalización de las asignaciones familiares y el 82% móvil, tres demandas muy sentidas por la clase obrera.
Después de una amplia actividad con La Verdad Obrera que nos permitió “auscultar” el ánimo de miles de trabajadores y trabajadoras, la nueva situación abierta con el 20N, nos enfrenta a nuevos y mayores desafíos.
Hace pocos días venimos de presenciar un parazo enorme. Millones de trabajadores le hicieron su primer paro general a un gobierno K. En medio de ello, un “nuevo” actor tuvo una actuación destacada en la jornada histórica del 20N: la izquierda, y dentro de esta, indudablemente, nuestro partido.
Desde que el gobierno anunció hace algunos meses que el 7D cambiaría el mapa mediático (aprovechando el fin de la medida cautelar por la cual Clarín no podía ser obligado a desprenderse de licencias) dijimos que cualquier modificación en la estructura de los medios masivos encarada por el gobierno nada tendría de democrática ni mucho menos iría en el sentido de alcanzar una verdadera libertad de expresión para las mayorías populares y la clase trabajadora.
En este momento en México se encuentran presos decenas de jóvenes que fueron detenidos durante las movilizaciones contra la toma de protesta (asunción presidencial) del priísta Enrique Peña Nieto. En la LTS nos encontramos en lucha, junto a organizaciones de derechos humanos, sociales y políticas por su libertad.
Al cierre de esta edición se suspendía el paro de tres horas por línea para el día 6, en función de una audiencia que se realizará en la Subsecretaría de Trabajo de la Ciudad.
A las 4 de la mañana llegamos a la estación Congreso de Tucumán con Claudio Dellecarbonara, con un delegado del taller Rancagua y otros delegados de tráfico. Sospechábamos que podían bajar los matones de la UTA y fuimos a apoyar.
Una cláusula delata el carácter corrompido de las negociaciones colectivas de trabajo en la era K: la ley 14.250 de negociaciones colectivas vigente desde 1955, y en particular su artículo 9, habilita la “cuota solidaria”. La clausula en cuestión cobró una enorme magnitud de uso y se expandió de manera sideral bajo los gobiernos K.
Las miradas se buscan, se dicen no estar solos. La confianza en las palabras se labra en los hechos en la planta de Lear Pacheco. El paro del 20 votado en asamblea de los tres turnos no era un mero accidente sino la muestra de que los trabajadores y trabajadoras de esta autopartista querían ser quienes decidan realmente qué hacer.
En las últimas semanas viene recrudeciendo la pelea entre el kirchnerismo y el delasotismo en la provincia, amplificándose nacionalmente.