(Neuquén; 28/05/07) Después de nuestra heroica huelga de 53 días, donde Sobisch y el MPN respondieron a nuestros reclamos con represión y el fusilamiento de nuestro compañero Carlos Fuentealba, quedan muchas cosas pendientes. La derogación del decreto 448, el efectivo pase a planta de los/as compañeros/as, el cese de todo tipo de persecución a los/as que participamos de la lucha y una fundamental, que es lograr que los responsables materiales, políticos e ideológicos del fusilamiento de Carlos vayan presos.

Una vez más pusimos todo en las asambleas, en las calles, en las rutas, en los puentes para que la lucha triunfara y para echar a Sobisch.

Como trabajadora docente y militante del PTS he sido parte de muchas de las luchas de los últimos años poniendo el cuerpo y también aportando ideas para que triunfen. Estoy convencida de que una de las debilidades más importantes que tenemos los trabajadores es la división que se plantea entre la lucha sindical y la lucha política, porque cada uno de nuestros actos, y sobre todo enfrentarnos al gobierno, es un hecho profundamente político. Esto hay que hacerlo conciente. No podemos limitarnos solo a luchar por nuestras reivindicaciones y que después sean otros los que “hacen política” y deciden nuestro destino.

Por eso hoy encabezo la lista de candidatos del PTS que está compuesta por trabajadores y trabajadoras de educación, salud, universidad, por estudiantes universitarios y de bellas artes y por numerosos obreros y obreras de Zanon, que han dado un ejemplo claro de que con organización y lucha se puede revertir el flagelo que es el cierre de una fábrica poniéndola a producir bajo su gestión.

Porque estoy convencida de que, como planteamos en esta campaña, los trabajadores y trabajadoras de Neuquén y el país necesitamos construir un gran partido de los trabajadores. Un partido que levante un programa para dar solución a los problemas de vivienda, agua, transporte, salud y educación que tenemos los trabajadores y el pueblo. Y que sea un referente contra los partidos patronales que son representantes de las grandes empresas como Repsol. Porque entre Sapag y Quiroga no hay ninguna diferencia profunda: los dos se proponen garantizarle los negocios a las petroleras que nos saquean, profundizando las crisis de Salud y Educación y reprimiéndonos cada vez que lo consideren necesario (hoy fue Carlos Fuentealba y ayer fue Pilli). Y también están los que se plantean como “opositores” y “representantes de los intereses del pueblo”, como el UNE, que proponen ser socios de la Repsol y son los que nos mantienen divididos en cada lucha y los que, ocupando lugares de responsabilidad en los sindicatos a nivel regional y nacional, como Julio Fuentes (Secretario adjunto de ATE nacional) no llamaron al paro nacional ni pusieron un solo peso para que la lucha de Neuquén triunfara.

Por eso así como lo hicimos en nuestra huelga, buscando la unidad y coordinación de las luchas, los invito a dar esta pelea por poner en pie un partido de la clase trabajadora y este 3 de junio a acompañar la lista 45 del PTS conformada por quienes estamos dispuestos a recorrer este camino.

Un saludo fraternal, Graciela Frañol