
El pasado miércoles 20 de marzo más de 20.000 docentes marchamos en La Plata, luego de protagonizar dos jornadas de paro masivo, y dimos una respuesta clara al gobierno: No al decreto de Scioli, No a los descuentos por los días de paro y por un plan de lucha hasta ganar, gritando bien fuerte por la defensa de la escuela pública.
Mientras la lucha continúa en varias provincias además de Buenos Aires (Neuquén, Chaco, Santa Cruz, Tierra del Fuego y Mendoza) los dirigentes celestes de la CTERA se niegan a convocar a un paro nacional para romper el techo salarial que impusieron Cristina Fernández y Sileoni. Exijamos a la dirección de CTERA un plan de lucha nacional para que las luchas provinciales triunfen y para romper el techo del 22%.
A los masivos paros del lunes y martes, se sumó una caravana en defensa de la escuela pública que constó de 7 columnas que partieron desde Carmen de Patagones (localidad ubicada en el extremo sur del territorio), Mar del Plata, Trenque Lauquen, Colón, Guaminí, San Nicolás y Junín, organizada por el Frente Gremial, culminando en una masiva movilización de más de 20.000 docentes. A esto se suma el paro de 48 horas de ATE y la masiva movilización del 19 de marzo, donde más de 10.000 trabajadores se hicieron presentes en rechazo a la oferta salarial miserable de Scioli en paritarias.
Desde la Lista Marrón somos parte de este proceso exigiendo 35% de aumento al salario en un solo pago, el aumento del presupuesto educativo, el pago de los salarios adeudados, el funcionamiento pleno de la obra social IOMA y la devolución de los descuentos por paros.
Basta de pelear separados: para derrotar a Scioli es necesario un plan de lucha unificado
Estatales, médicos y judiciales también salen a pelear por salario, paralizando la provincia. El problema que impide ganar es la política divisionista de las conducciones sindicales del SUTEBA y el Frente Gremial, ATE y el Fregepba, que se niegan a llamar a un plan de lucha conjunto con todos los trabajadores estatales.
En el acto, Roberto Baradel dijo que el conflicto “no cesará” hasta que los docentes reciban una “respuesta razonable” de la provincia, que determinó por decreto un aumento salarial del 22,6 por ciento en tres cuotas para los maestros, pero no plantearon ninguna continuidad para esta lucha.
Unamos nuestras fuerzas, se puede ganar
Exigimos al Suteba, el Frente gremial, ATE, AJB y a los gremios estatales que han rechazado el aumento, a poner en marcha un plan de lucha unificado con paros progresivos y movilizaciones. Impulsamos asambleas comunes de docentes, estatales, médicos, afiliados y no afiliados y reclamamos un congreso de delegados de base con mandato de todos los trabajadores del Estado para llevar al triunfo nuestros reclamos.
Junto a estas medidas es necesario apelar al apoyo de las familias trabajadoras y del pueblo pobre que se solidarizan con nuestra lucha, incorporándolas activamente a la pelea por la defensa de la escuela pública, hoy nuevamente atacada por el ajuste de Scioli y Cristina Fernández.
Subsidios a las confesionales, deuda externa y ajuste a los trabajadores
Mientras las escuelas se caen a pedazos y nuestros salarios se decretan a la baja, la Iglesia Católica, ahora con Papa argentino, sigue gozando de los más variados aportes y beneficios estatales. Particularmente llamativos son los millonarios subsidios a las escuelas confesionales que se multiplican a costa de del presupuesto de nuestras escuelas y nuestro salario.
Nuestra pelea es por la escuela pública. Por eso exigimos terminar con los subsidios a la educación privada y aumento de presupuesto educativo.