
Al respecto el referente del PTS en el Frente de Izquierda Unidad, Octavio Crivaro declaró: “La situación del transporte urbano de pasajeros en nuestra ciudad arrastra años de crisis, pero se desnudó bajo la pandemia. El intendente Pablo Javkin, con el poder que le dio el Concejo municipal, ajusta sobre el transporte público. Ese transporte que usan todos los días los trabajadores, sobre todo los esenciales en los últimos meses, no sólo aumentará el boleto. La unificación de líneas deja a barrios enteros sin conexiones hacia el centro, hospitales y lugares de trabajo o disminuye la frecuencia del servicio, como han denunciado diferentes vecinales. También afecta a la educación, dejando zonas claves como la Siberia sin importantes conexiones de transporte. Hace unos meses las y los choferes de colectivos se vieron obligados a parar contra las empresas para exigir el pago de salarios adeudados. Fueron cientos por las calles de la ciudad reclamando su derecho básico a cobrar en tiempo y forma luego de haber trabajado los peores meses de aislamiento por estar frente a un servicio esencial”
Crivaro denunció un sistema de transporte en crisis total y exigió una salida de fondo para los trabajadores y la sociedad: “No queremos que haya ni un solo despido de choferes por parte de estos empresarios del transporte. Para tener un transporte público, económico y de calidad, el municipio debería hacerse cargo del mismo estatizándolo, y que haya control de trabajadores y usuarios para que este derecho no se convierta en un negocio para unos pocos. Esta reforma encubre un ataque a usuarios y trabajadores. Por eso desde las vecinales que denunciaron la reforma, junto a los sindicatos, las y los trabajadores de la UTA, los centros de estudiantes y las organizaciones políticas debemos movilizarnos en unidad para frenar este ataque al sistema de transporte público y a todos los trabajadores y la sociedad”.