Los días martes y miércoles los bancos pararon de forma contundente. Como parte del plan de lucha, marcharon entre 1.500 y 3.000 trabajadores cada día. En el Banco Central, una concurrida asamblea, voto continuar con el paro hasta el viernes 29, por demandas salariales y las que atañen a la propia institución.

El gremio viene de un paro de 24 horas el 12 de mayo y de realizar medidas de fuerza como ceses de atención por dos horas. El sindicato pide un 30% de aumento, enfrentando el techo impuesto desde el gobierno a través del ministro de Economía Axel Kicillof y la negativa a modificar sustancialmente el impuesto a las ganancias que recae sobre los salarios de la mitad de los empleados bancarios.

Por su parte, las comisiones gremiales internas del Banco Provincia en Bs As, Banco Ciudad, Banco Central, Nación de Neuquén, Credicoop de Bahía Blanca, entre otros, junto a agrupaciones opositoras reclaman un acuerdo que no sea menor a un 40% (frente a una inflación de más del 29%), la anulación del impuesto al salario, el pase a planta de los tercerizados, el ingreso de personal, el respeto al convenio bancario y se denuncian los despidos y retiros en entidades como el Banco Hipotecario.

Martin Pogliano, delegado de base del Banco Ciudad y miembro de la Agrupación Marrón Bancaria, nos decía: “es necesario convocar a asambleas para que los trabajadores decidamos. Esa es la forma de organizarnos y que nos dará la fuerza necesaria para lograr las demandas sentidas del gremio como son el pase a planta bancaria de miles de compañeros tercerizados o contratados de limpieza, sistemas, mantenimiento, seguridad entre otras tareas”.

Marcelo, delegado de base del Banco Provincia: “Una cosa son las demandas que plantea el sindicato que es sólo aumento salarial y por el Impuesto a las Ganancias, pero tenemos demandas pendientes porque hay un montón de compañeros que son monotributistas, tenemos contratados desde hace años. Queremos que pasen a planta; queremos un crédito hipotecario que podamos pagar, con una tasa subsidiada por el estado, pero el sindicato no habla de eso. Queremos ingreso de personal porque hay sucursales que no dan abasto, abarrotadas de gente porque atendemos todos los problemas que tienen en la provincia de Buenos Aires.

Eduardo, trabajador del Banco Ciudad: “El sindicato se maneja siempre a espaldas de los trabajadores, y la gremial (CI Banco Ciudad) en cierto punto también. Tengo en mi caso serias diferencias con ambos, pienso que los dos necesitan más democracia sindical, que son dos aparatos diferentes, pero dos aparatos al fin”.