
Muchos de los grandes empresarios hicieron su fortuna en negocios con el Estado, como los grandes contratos de obras y las concesiones de servicios públicos, para los cuáles siempre reciben subsidios. El dinero siempre lo pone el pueblo: a través de los impuestos, o de las tarifas.
Algunos empresarios además ocupan cargos políticos, y desde ahí continúan su enriquecimiento haciendo lobby para determinados sectores. Repasamos algunos ejemplos: la familia Macri, los funcionarios de la Ciudad de Buenos Aires, y los orígenes de la fortuna del Grupo Roggio, dueño de Metrovías.
Roggio
Como parte de la Cámara Argentina de la Construcción y la APEGE, llamaron al golpe del ‘76.
Dictadura: ganaron US$ 1.000 millones con obra pública.
Gobierno de Alfonsín: como parte de los “capitanes de la industria” monopolizaron obra pública y servicios.
Década ’90: se quedan con el subte (Metrovías), el FFCC Urquiza, peajes y autopistas (Covisur, Coviares y Puentes del Litoral), residuos (Cliba) y obra pública.
Era K: mantienen y suman más negocios. Autopista Rosario-Córdoba, parte FFCC Belgrano Cargas y San Martín. Parte UGOFE y UGOMS (FFCC Roca, Sarmiento y Mitre)
Inversiones casi inexistentes + subsidios: ganancias millonarias
$413 millones ganaron con Metrovías hasta mayo 2012
$100 millones “extras” al año sacan con empresas vinculadas a Metrovías como Metronec
Macri
1975: su familia poseía 7 empresas
Fin dictadura: ya tenían 46
Como los Roggio, los Macri son parte de la ‘patria contratista’ que vivió como parásito del Estado
Macri declara que posee $67.690.812. Tiene $22 millones en acciones
Ministros PRO
Incremento patrimonial en gestión pública. Propietarios de mansiones en los barrios más caros, autos importados, tierras donde se planta soja o se cría ganado.
Rodríguez Larreta (jefe de Gabinete): su fortuna creció en más de un 100% en un año
Daniel Chaín (ministro Desarrollo Urbano): incremento del 53%. Es empresario de construcción, sector que gestiona y en el que hace negocios
Juan Pablo Piccardo (presidente SBASE): Creó la fascista UCEP (Unidad de Control el Espacio Público) que apaleaba personas sin techo y realizaba violentos desalojos
$5.000.000 facturaron en poco tiempo amigos y parientes del macrismo por contrataciones directas y sin licitar en el subte.