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DETRÁS DE CADA DESPIDO HAY UNA FAMILIA

Lear | Sigue la campaña en la Alimentación

Si algo está generando la pelea que hoy llevan a delante los trabajadores despedidos de Lear es la solidaridad de distintos sectores del movimiento obrero. Agrupaciones, organizaciones sociales, partidos de izquierda, la juventud y los estudiantes. Sí, algo está despertando: la unidad de los trabajadores como clase, los trabajadores como sector fuerte de la sociedad

PTS Ciudad de Buenos Aires

28 de julio 2014

Si algo está generando la pelea que hoy llevan a delante los trabajadores despedidos de Lear es la solidaridad de distintos sectores del movimiento obrero. Agrupaciones, organizaciones sociales, partidos de izquierda, la juventud y los estudiantes. Sí, algo está despertando: la unidad de los trabajadores como clase, los trabajadores como sector fuerte de la sociedad. Y esta unidad se expresa no sólo en las jornadas nacionales de lucha (que cabe destacar jornada a jornada la imaginación va superando los obstáculos que imponen la patronal, el sindicato y el gobierno con su ladero Berni. Si, pasamos la represión, frenamos a la burocracia carnera y dejamos desorientados a la gendarmería) sino también en las acciones que llevamos adelante todos los días. Nosotros desde alimentación salimos decididos a barrer cada alimenticia en capital. Y así arrancamos en FelFort el día jueves 24 de julio que, junto al reciente delegado Roberto firme de la alimenticia Lodiser, en representación de la comisión interna, esperamos la salida del turno noche. Entre afiches de Lear, con el boletín y los bonos solidarios a hacer carne la solidaridad obrera que recién da sus primeros pasos. Repartimos cincuenta boletines y entregamos bonos a los más conocidos, quienes tomaron el compromiso de pasarlo al resto de los compañeros y desarrollar la red solidaria que de fuerza para el triunfo. Robertito (para los amigos) intercambió con los que salían desde su experiencia de recuperar la interna hasta la importancia de llegar organizados ante los ataques patronales. Dejando en claro que lo que hoy viven en la carpa apostada en la puerta de lear no ea más que los primeros pasos en descabezar las org obreras para avanzar con más despidos y ataques. Se estrechaban las manos. Palabras de ánimo y compromiso salían ambas partes. "Ojo con quien hablas, está lleno de buchones", aconsejaba robertito y terminaba la jornada con el compromiso de llamar a la brevedad a un comité solidario por lear y ser parte de una lucha que ya no es sólo de los despedidos sino de toda una clase que ve que si ganan los trabajadores ganamos todos. No más familias en las calles, no más despidos ni suspensiones. Detrás de cada trabajador hay una familia.

Prensa

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