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MOVIMIENTO OBRERO

LAS LUCHAS CONTRA LA PRECARIZACIÓN ALREDEDOR DEL MUNDO

Un “modelo” de trabajadores precarizados

El “modelo” kirchnerista consolidó la precarización laboral de los noventa, que hoy sufre más de la mitad de los trabajadores argentinos. Los metalúrgicos de Rosario son un testimonio de que la juventud es la más explotada en las fábricas. La burocracia sindical seduce al capital y garantiza sus ganancias. En las automotrices se extienden nuevos convenios precarios. La Argentina K no tiene nada que envidiarle al “mundo precario”.

Hernan "Bocha" Puddu

23 de abril 2015

Un “modelo” de trabajadores precarizados

El mundo ha cambiado mucho desde que los obreros socialistas del mundo proclamaran el 1° de mayo como día internacional de los trabajadores, tomando a los mártires de Chicago que luchaban por las 8 horas como bandera de la lucha contra el capital.

Pero al revés de lo que dicen interesadamente los apologistas del capitalismo, la clase obrera es infinitamente más numerosa que entonces y por ende potencialmente mucho más poderosa que jamás en la historia, si se dispone a romper las cadenas que la oprimen y no le permiten disfrutar plenamente la vida.

Somos muchos más que nunca en nuestra historia, pero estamos en la enorme mayoría de los casos bajo una precarización monstruosa, que obliga a pensar cuanto la rueda de la historia, de nuestros derechos, de nuestras conquistas, no ha ido marcha atrás.

Por eso no es casual que la generación que hoy pisa la tierra del siglo XXI tenga que emprender peleas desde muy atrás, luchando por un salario mínimo como lo hacen en más de 200 ciudades de EE.UU. los trabajadores de WalMart y de las grandes cadenas de comida rápida como Burger King, Taco Bell y otros comercios.

O que en el continente asiático, las trabajadoras de Yue Yuen Industrial Holding en China que fabrican las Adidas, Nike, Converse, Puma y otras que quizás tengas puestas ahora, realizaron un paro porque Yue Yuen “nunca paga lo suficiente” dice un activista. Y si en China -”el taller del mundo” que encontraron los capitalistas para bajar los salarios y precarizar el mundo entero- las obreras se revelan contra la esclavitud y los salarios de miseria, ¡es una gran noticia para las obreras y obreros del mundo!

America Latina no se queda atrás

También en las ramas con “tecnología de punta”, la precarización busca arrasar con conquistas obreras. En el México de la industria maquiladora, los trabajadores de la multinacional automotriz Delphi realizaron un paro para destituir al representante gremial por corrupto, por reelegirse sin elecciones y por mantener condiciones de trabajo idénticas a las que denuncian los obreros mexicanos de Mazda, otra trasnacional automotriz donde los brutales ritmos de producción llevan desde las habituales tendinitis y hernias de disco, hasta casos donde entre piezas y piezas sufren convulsiones y son arrastrados por los capataces hacia la enfermería para ser rápidamente reemplazados por otros. Nada que envidiarle a la patronal de Lear que en Honduras obliga a sus empleados a usar pañales descartables para que no vayan al baño.

Claro está, que todo esto es imposible sin la complicidad de los sindicalistas que sí disfrutan del “progreso” haciéndose empresarios y facilitando la precarización y la tercerización. Y ni hablar de los gobiernos, incluso los “progresistas” como el PT de Dilma y Lula en Brasil, que acaban de hacer pasar la Ley 4.330 de precarización laboral, que llevó a los hermanos laboriosos del país vecino a una jornada nacional de lucha con movilizaciones en San Pablo y varias ciudades más y paros en grandes automotrices como Honda, Mercedes Benz, Toyota y otros polos metalúrgicos. Así como en Argentina la “década ganada” del kirchnerismo deja como saldo un 34% de trabajadores en “negro” y a la mitad de la fuerza laboral ganando menos de $5.500 pesos, en Brasil con el PT, la tercerización se triplicó del 2003 al 2013, pasando de 4 a 12,7 millones de trabajadores precarios.

En Chile la situación no es muy distinta, hay luchas por reclamos y demandas postergadas. Allí rige un Código Laboral impuesto por la dictadura de Pinochet. Por eso mientras Bachelet está obligada por los de abajo a reformular la Ley Laboral, los trabajadores miran con desconfianza esta reforma. Y aunque ya lograron contra el empresariado que no se hable de “competitividad y productividad”, llaman a un paro nacional días antes del 1° de mayo, para advertir que quieren reconquistar el derecho a huelga, la negociación de convenios por rama de la industria y contra la criminalización de los dirigentes. Parece mentira, pero no es “legal” el derecho a huelga ni la negociación por rama.

Por eso, este 1° de mayo, una de las banderas que no pueden faltar es la lucha contra la precarización, la tercerización y el trabajo en “negro” que sufre la mayoría de nuestra clase mas allá de las fronteras. Pero levantaremos nuestros puños sabiendo que a lo largo y a lo ancho del mapa tenemos hermanos dando las mismas peleas para conquistar un futuro sin explotación ni opresión. La unidad socialista del movimiento obrero en América Latina y el mundo es la bandera de nuestro futuro.

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