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Mujer

RIO NEGRO: 10 AÑOS DE CARCEL PARA ANZALDO

Con la lucha de las mujeres se condenó al violador

El pasado 2 de noviembre, concluyó el juicio al violador Carlos Anzaldo que se seguía en el Juzgado N° 2 de Cipolletti (Río Negro), con una condena a diez años de prisión. El médico ginecólogo y profesor había sido acusado por una alumna del colegio donde trabajaba, quien denunció haber sido violada por este individuo en el consultorio que tiene frente a la misma escuela.

8 de noviembre 2007

El pasado 2 de noviembre, concluyó el juicio al violador Carlos Anzaldo que se seguía en el Juzgado N° 2 de Cipolletti (Río Negro), con una condena a diez años de prisión. El médico ginecólogo y profesor había sido acusado por una alumna del colegio donde trabajaba, quien denunció haber sido violada por este individuo en el consultorio que tiene frente a la misma escuela.

Sin embargo, mientras se aguardaba el juicio oral, Anzaldo siguió ejerciendo su profesión médica desconociendo la resolución del Ministerio de Salud que le había retirado su matrícula y, con total impunidad, caminó por las calles de Cinco Saltos durante todo ese tiempo. En ese mismo tiempo, por las distintas denuncias que se fueron sumando, se supo que Anzaldo violó, abusó y amenazó a muchas jóvenes, escudado en su acomodada posición económica que le permitió contar con abogados como Pandolfi –conocido defensor de violadores de la región y amigo personal del asesino Sobisch, el gobernador de Neuquén que es responsable político del asesinato de Carlos Fuentealba.

Las estrategias de los abogados y todos los intentos de mostrar a este violador como víctima de un complot en su contra fueron vanos. La Cámara II° del Crimen de Cipolletti condenó al ginecólogo, finalmente, a la pena de diez años de prisión y la inhabilitación para ejercer como médico y docente, ordenando su inmediata detención. Pero no tenemos ninguna confianza en esta justicia que ya dio sobradas muestras de irregularidades en el caso de la desaparición de Otoño, en el triple crimen de Cipolletti y tantos más. Sabemos que sólo fue posible arrancar esta sentencia con la lucha y la movilización del movimiento de mujeres, y el apoyo de las organizaciones populares y estudiantiles que se sumaron a nuestro reclamo.

Quienes integramos la agrupación Pan y Rosas creemos que es necesario seguir movilizadas y organizadas junto a las agrupaciones de mujeres, las organizaciones obreras combativas y estudiantiles para exigir que se haga efectiva la condena, incorporando también las causas en las que está procesado por otros casos similares.

Prensa

Virginia Rom 113103-4422

Elizabeth Lallana 113674-7357

Marcela Soler115470-9292

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