Las multinacionales telefónicas siguen negándose a recomponer nuestro salario, por tal motivo realizamos un contundente paro, con un acatamiento del 98%, tanto en Telefónica como en Telecom, este 12 y 13 de junio. Este paro demostró la gran disposición de los telefónicos para enfrentar a las empresas, y se extendió al conjunto de la FATEL, abarcando Tucumán, Rosario, Santa Fé, Chaco, Luján; Capital y Gran Buenos Aires. Sin embargo, la Azul y Blanca, dirección del gremio de Buenos Aires y parte de la dirección de la FATEL, propuso seguir las medidas con un quite de colaboración.

Luego de la fuerza demostrada en este paro y en otro anterior, incluyendo una movilización, los compañeros están dispuestos a profundizar el paro y avanzar en la lucha.

Por un aumento del 25%

Este espíritu y decisión de pelear se refleja en los edificios donde se hacen asambleas, en los cuales se vota por amplia mayoría exigir un plenario de base con mandato para profundizar las medidas, y surgen propuestas de paro por tiempo indeterminado, con toma de edificios y una gran movilización a las empresas y al mismo Ministerio de Trabajo. Nuestro reclamo es un aumento de 25%, nueve puntos arriba del techo impuesto por la CGT, la CTA junto al gobierno y las grandes patronales. Para conseguirlo debemos levantar, como plantea un gran sector de la base, un verdadero plan de lucha, que unifique las demandas no sólo de los efectivos sino también de los tercerizados, para los contratas y teleoperadores de call centers, cuestión que venimos levantando desde la Violeta desde el principio, luchando por un convenio único.

Hay que ganar las calles

Con todo, hay algo que parece tomar cada vez más luz: la Azul y Blanca no está convocando a un verdadero plan de lucha, y se niega a sacar el conflicto a la calle en un claro acuerdo con el gobierno de Kirchner y la coyuntura electoral, cuestión planteada en un plenario por el mismo secretario general Osvaldo Iadarola. Sin duda, sacar el conflicto a la calle ayudaría a poner en conocimiento a la sociedad sobre nuestro reclamo; pelea que debemos unificar con los usuarios planteando tarifa gratis para los jubilados para las escuelas estatales y hospitales, por ejemplo. Esto produciría una gran unidad obrera y popular para enfrentar a estas multinacionales.

Más democracia obrera

Esta lucha por salario debe llevarse adelante con el método democrático de las asambleas y respetando sus mandatos de la base, que evidentemente quiere pelear mucho más que la dirección del sindicato, la que prioriza los acuerdos por arriba con el gobierno mientras los telefónicos piden un plan de lucha serio. Desde la lista Violeta peleamos en cada una de las asambleas juntos con varios compañeros independientes por la democracia para la lucha y la combatividad para el programa, planteando paro con tomas de edificio sacando el conflicto a la calle con movilizaciones y cortes de calles. Sólo con un plan de lucha hasta el final podremos romper el techo salarial.