En La Verdad Obrera 142 señalábamos que el Partido Comunista quería dejar atrás o reducirla a un papel auxiliar a su alianza con el MST, Izquierda Unida, y que sus esfuerzos están centrados en poner en pie un "frente opositor contra el neoliberalismo" para refundar una nueva centroizquierda, haciendo un llamado común –en Rosario- a construir un espacio político alternativo no solo con el Partido Socialista con quienes ya se unieron electoralmente, sino también con kirchneristas transversales como Hermes Binner e incluso el ARI, las PYME y distintas vertientes religiosas.
El PC sueña con repetir la experiencia uruguaya del Frente Amplio, que se perfila como favorito para ganar las próximas elecciones presidenciales al otro lado del Río de la Plata.

¿Antiimperialismo y antineoliberalismo?

El PC dice querer un frente antiimperialista y antineoliberal, pero su modelo uruguayo dista mucho de ello. En lugar de llamar a romper con el FMI y desconocer la deuda externa Tabaré Vázquez ha dicho que honrarán la deuda "si nos corresponde ejercer las responsabilidades del gobierno nacional, por una razón de elemental continuidad institucional cumpliremos las obligaciones contraídas por anteriores administraciones" (Discurso en la Cámara de Comercio argentina-uruguaya. Mayo 2004) No sólo eso, en su gira por Europa y EE.UU el candidato del FA fue acompañado por Danilo Astori –postulante al Ministerio de economía- dirigente de la derecha de la coalición. Este último declaró, que el gobierno frenteamplista va a continuar con los lineamientos de subordinación al FMI del neoliberal Jorge Batlle: "Nuestra definición es por un lado mantener la política que se ha estado desarrollando en materia de deuda pública, que entendemos ha sido beneficiosa para el país; mantener también las políticas monetaria y cambiaría, que entendemos también han encontrado un sendero positivo" (13/07/04. Declaraciones en Washington. Página Web Asamblea Uruguay). Tabaré afirmo también que "instrumentará medidas para atraer las inversiones externas, entre ellas la reducción del impuesto al crédito bancario y la exoneración del impuesto a la renta a las empresas que accedan a reinvertir una parte de sus utilidades" (Brecha, 9/7)
Sumemos a lo recién expuesto que el Ministerio de economía le fue ofrecido a Enrique Iglesias –presidente del BID- y tenemos completo un cuadro político de una coalición "progresista" que se prepara para gobernar a favor del establishment tal como Lula en Brasil. Otro de los modelos del PC argentino.

Se buscan nuevos aliados... kirchneristas

En Propuesta 686 (8/07/04) el PC insiste en su "alternativa política real" contra el imperialismo y el neoliberalismo, sin hacer mención siquiera de la existencia de Izquierda Unida, salvo para decir que junto al diputado de la CTA, Claudio Lozano, la IU es "parte de un espacio que se va consolidando en el Parlamento (...) que promueven proyectos en correspondencia con los intereses del pueblo». Recordemos que Lozano es un transversal llegado al Congreso de la mano del ex aliancista Aníbal Ibarra y que su prédica consiste en responsabilizar a Lavagna por las políticas más de derecha del gobierno, a favor –por omisión- de K.
En detrimento del MST, el nuevo aliado privilegiado del PC, es el Partido Socialista, que acaba de felicitar a Kirchner por la nominación de Carmen Argibay en el máximo tribunal nacional diciendo que «Su incorporación a la Corte -al igual que las recientes designaciones de Eugenio Zaffaroni y Elena Highton- contribuirá a renovar la confianza de nuestra sociedad en las instituciones», (23/06/04. Pagina Web PS). Pero no sólo eso sino que –en medio de la campaña antipiquetera y casi en paralelo al envío de tropas a Haití y el preacuerdo con el FMI- llamó a la conformación de un Consejo económico y social para "generar un espacio de diálogo e integración de los distintos sectores económicos, sociales y políticos con el fin de superar disputas y lograr los consensos necesarios que abran el camino a una concertación nacional" (10/06/04. Pagina Web PS). Como ya dijimos en LVO 142, el frente que nos propone el PC ni siquiera es opositor.

El MST debe romper el seguidismo al PC

Los compañeros del MST, en sus distintos sectores, no responden y –peor aún- avalan la política de conciliación de clases -y hasta semikirchnerista- del PC. El MST reivindica la continuidad de IU y el frente electoral con el PS en la provincia de Buenos Aires. El MST le da el tono "izquierdista" a la política de su socio recubriéndola en nombre de la "unidad de la izquierda". Pero la "unidad de la izquierda" no es una herramienta política que sirva si no es clasista, como parte de la lucha por la independencia de clase, contra el gobierno, la burguesía, la burocracia sindical, los partidos patronales y la centroizquierda. El MST, por el contrario, sólo la plantea en términos electoralistas, constituyendo el crecimiento en los escenarios del régimen un fin en sí mismo, por lo cual acepta políticas de conciliación de clases.
Si el MST quiere ofrecer una alternativa a la clase trabajadora tienen que imponer un giro radical y luchar contra la estrategia reformista del PC, rompiendo IU. Los invitamos a reflexionar y discutir juntos contra el reformismo y a impulsar la lucha por un frente o movimiento político de los trabajadores por la independencia de clase.