Sigue pasando el tiempo y los aeronáuticos escuchamos cada día una excusa distinta de porqué pasados ocho meses del comienzo de la paritaria no tuvimos el aumento que nos corresponde. La FAPA (Federación Argentina de Personal Aeronáutico) sacó un comunicado donde dice: “la intransigencia patronal conducida por el Dr. Mariano Recalde, hace que pase el tiempo de la conciliación sin posibilidad de un acuerdo, mostrando una insensibilidad hacia los trabajadores, inusual en un funcionario que dice ser de un gobierno Nacional y Popular”. Lo que oculta este comunicado es el hecho de que en estos 8 meses no hubo ni una sola medida de lucha por parte de la FAPA. Dejando a las claras que la realidad de los dirigentes de la FAPA está muy lejos de los trabajadores y sus necesidades. Peor aún, la intransigencia patronal se da cuando cada vez es más público y notorio el desfalco presupuestario que está operando desde el gobierno a través de las oscuras contabilidades de la patronal camporista en Aerolíneas. Tenemos que quebrar la intransigencia patronal con un plan de lucha consecuente, votado en asamblea para que ningún aeronáutico a fin de mes tenga en su bolsillo un aumento menor al 35% en el básico, sin ítems “no remunerativos” (en negro) que después, cuando se les ocurre, dejan de pagar. La agresión de la patota de APA contra los trabajadores de base que pidieron la palabra en la reunión de la FAPA muestra la complicidad de la cúpula de dicho sindicato con Recalde y cía. No nos tragamos el verso de comunicados que quedan en papel mojado a la hora de pasar a la acción concreta. Desde la agrupación El Despegue exigimos a la FAPA y APA la convocatoria inmediata a una asamblea general de trabajadores aeronáuticos, para discutir y votar un plan de lucha que le imponga a la patronal el aumento del 35% al básico, sin cuotas; la reinstalación del compañero Cristian Fontana y la mejora en las condiciones laborales.