Los trabajadores de la Dirección General de Cultura y Educación obtuvieron un contundente triunfo. Luego de semanas de lucha, de 11 días de huelga por tiempo indeterminado con ocupación del edificio central, lograron que Scioli-Mariotto y De Lucía dieran marcha atrás con el recorte salarial, gestionaran el pase a planta de 127 trabajadores precarios y reincorporaran a los 14 contratados despedidos. Además, se abrió una mesa de negociación para discutir la equiparación y el blanqueo de lo que se cobra como compensación salarial.

Una masiva asamblea de más de 2000 trabajadores el 5/10 discutió punto por punto el acta propuesta, haciendo enmiendas y cambiando las partes ambiguas antes de que se firmara, y luego festejaron el triunfo marchando a la gobernación.

Proceso profundamente antiburocrático

En el hall central del edificio ocupado resaltaba la única oficina que “trabajó arduamente” esos días de lucha, y que fue impulsada por la asamblea: MESA DE DESAFILIACIÓN (decía el cartel). Por ese escritorio circularon más de 1200 trabajadores que se desafiliaron a UPCN hartos de la traición de este sindicato totalmente oficialista, que firma y cierra acuerdos paritarios a la baja, y que durante la batalla del aguinaldo trató de desactivar la lucha avalando el pago en cuotas, y que en la DGCyE acordó con el recorte.

Este conflicto ya dejó importantes conquistas: la Asamblea como órgano de decisión, impulsada y promovida por la antiburocrática Junta Interna de ATE del Ministerio, pero también la conformación de un Cuerpo de Delegados, con representantes votados en cada Dirección y Dependencia del Ministerio, que unifica a todas las oficinas. Hay que impulsar el desarrollo de este Cuerpo de Delegados que jugó un papel destacado durante la toma. Este martes fue la primera reunión y participaron 300 trabajadores. Todos quieren ser delegados y se sienten protagonistas de la lucha.

Un camino a seguir

Scioli y Mariotto no saben cómo llegar a diciembre y para 2013 proponen un presupuesto que el mote de austero le queda chico; no tiene pauta de aumento salarial y congela las plantas. Para que la crisis no la paguemos los trabajadores hay que dejar de pagar la deuda e ir por impuestos a los empresarios que amasaron fortunas, a las patronales agrarias, a los capitalistas del juego, a la renta financiera y a las mineras. Esta salida no la podremos imponer con actos políticos testimoniales con sectores patronales como impulsa la CTA. Los trabajadores de Educación muestran el camino: asambleas masivas y democráticas, huelga general y ocupación de dependencias públicas, para frenar el ajuste e ir por nuestras reivindicaciones.

Titi Bernaola, delegado mantenimiento Junta Interna ATE DGCyE

Luana Simioni delegada General Junta Interna ATE IOMA