Llevamos más de dos años y medio de lucha los trabajadores del INDEC. Treinta y un “abrazos”, en pleno centro de la ciudad donde Pino Solanas obtuvo tantos votos. Nunca vino, Pino. No le ha faltado oportunidad para denunciar a Moreno y la intervención por los medios, pero también lo hacen Gerardo Morales de la UCR o Luis Juez desde Córdoba. ¿Por qué no acompaña la buena denuncia y convoca a su electorado a movilizarse para enfrentar las injusticias, junto a los trabajadores del INDEC?

No es la primera vez que las posiciones de Pino Solanas son para la TV. El golpe de Honduras es un caso testigo de una lógica que tiene coherencia. Sus denuncias contra el golpe no se convirtieron en llamar a movilizar en ninguna de las tres marchas al Consulado que ya se realizaron en la ciudad que, dijo, va a ganar en el 2011. Pero el caso del INDEC ya es demasiado. Pino Solanas filmó todo Buenos Aires y el país revelando la destrucción de los trenes, la falta de vivienda, la crisis de la salud, la contaminación de las minas a cielo abierto. Pero a la lucha del INDEC no vino ni a filmar. Difícilmente se pueda de esta forma contribuir a una salida alternativa para el INDEC, propia de los trabajadores que estamos luchando, independiente de los proyectos del oficialismo o de la derecha.