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Paritarias en la UOM

Luego de dos meses de negociación y un tibio plan de lucha que no fue llevado adelante en todas las seccionales, el secretariado de la UOM firmó un 28% en dos cuotas, más una suma no remunerativa de $600 a pagar en tres cuotas.

5 de junio 2008

Luego de dos meses de negociación y un tibio plan de lucha que no fue llevado adelante en todas las seccionales, el secretariado de la UOM firmó un 28% en dos cuotas, más una suma no remunerativa de $600 a pagar en tres cuotas.

Tanto empresarios como dirigentes explicaban a la prensa que debido al atraso en los básicos y el aumento en la inflación, era imposible mantener el techo salarial del 19,5% impuesto por el gobierno.

Lo logrado no responde a nuestras necesidades. Pero le sirve a la burocracia para tranquilizar a las bases que comenzaban a expresarse en algunos sectores y en las seccionales del interior, que cumplieron el plan de lucha parando, generando asambleas, en algún establecimiento llegando a piquetes en los portones, cortes como realizaron los compañeros de Emfer cortando la Gral. Paz.

Ahora, como compensación, el sector empresario reclama más subsidios, promociones industriales y restricciones efectivas a los productos de importación, centralmente productos Chinos. Con el dólar “planchado” a $3,10 el vicepresidente de la Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina (ADIMRA), Sergio Vacca asegura que “es nocivo para la industria argentina”, y que aceleró “la caída de la competitividad de los exportadores y de aquellas empresas que deben hacer frente a los productos importados” (infobae). Quieren una nueva devaluación que licuará aún más nuestros magros salarios. La patronal intentará que seamos los metalúrgicos los que paguemos sus malos negocios, mientras la inflación ya se está comiendo el aumento y por eso estará planteada la lucha por la reapertura de paritarias antes de fin de año.

La burocracia sindical también logró posicionar a Antonio Calo, secretario nacional de la UOM, como futuro hombre de recambio en la CGT, o contra Moyano o acompañándolo como adjunto.
Las seccionales de la rama 21, las siderúrgicas (Villa Constitución, San Nicolás, Campana) fueron liberadas a cerrar acuerdos por fábrica (Acindar, Siderar, Siderca) que aún no se han concretado.
En Villa Constitución se dividió la directiva entre dos históricos Piccinini versus Victorio Paulón.

En el interior, por el conflicto del campo, en zonas como Armstrong . Las Parejas en Santa Fe, la industria metalúrgica está paralizada ya que está ligada a fabricación de máquinas agrícolas. No podemos aceptar suspensiones ni reducciones salariales de estos patrones que han hecho millones en estos años.

Los trabajadores necesitamos recuperar poder adquisitivo, nivel de vida para nuestras familias, pelear por mejoras en las condiciones de trabajo y contra los terribles ritmos de producción impuesto por las patronales. Esto no lo podemos lograr de la mano de los actuales dirigentes ya que no luchan detrás de estas consignas. Hay que ir recuperando las organizaciones de base de los trabajadores, delegados y comisiones internas. Hay que desterrar los contratos basura y las pasantías truchas que generan mano de obra calificada a bajo costo laboral y llevar a convenio a los trabajadores de las tercerizadas, en el camino de lograr la unidad de las filas obreras hacia el interior de las plantas fabriles.

Trab. metalúrgico/ corresponsal

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