1ro de octubre
A pesar del brutal desalojo de la movilización frente a la embajada de Brasil la madrugada del martes 22/9, la resistencia se mantuvo firme en su lucha por derrocar a los golpistas, abriendo una situación de gran inestabilidad política con movilizaciones y enfrentamientos con la policía y el ejército. Micheletti ha intentado sacar a Zelaya de la embajada de Brasil para imponer una relación de fuerzas más favorable, que le permita poner las reglas de una negociación, siendo su gran preocupación, la imposición de sus comicios el 29/11.
24 de septiembre
Según Lula, Zelaya llegó solo a la Embajada brasileña en Honduras y su gobierno se limitó a autorizar su entrada, aduciendo razones relacionadas con los “derechos humanos”. Sin embargo, es muy difícil creer que Lula haya sido tomado por sorpresa por el regreso de Zelaya y menos aún que éste haya decidido ir a la Embajada sin un acuerdo previo con el gobierno brasileño.
La intervención de Brasil en la crisis hondureña tiene que ver con sus aspiraciones a jugar un rol de liderazgo regional.
24 de septiembre
Ante el arribo del depuesto presidente Manuel Zelaya a Honduras, el gobierno golpista endurece su política represiva en todo el país, se mantiene el toque de queda desde el 21 de septiembre, hay dos centros de detención ilegales instalados con cientos de detenidos, hay cortes permanentes de luz y de teléfono, se han saboteado los medios alternativos, canales y radios antigolpistas como Cholusat y Radio Globo están fuera del aire, y Radio Progreso se mantiene por Internet transmitiendo clandestinamente.