El pasado 31 de enero, el zócalo de la capital mexicana fue ocupado por cientos de organizaciones obreras y campesinas que aglutinaron, según los organizadores, a cerca de 200 mil personas.
Las autoridades de la petrolera estatal PDVSA y del Ministerio de Trabajo, han separado de su puesto al compañero Orlando Chirino, reconocido dirigente sindical y de la izquierda que, junto a los millones de trabajadores y trabajadoras y de los sectores populares, enfrentó el golpe de estado proimperialista de abril de 2002 y el posterior paro-saboteo patronal, en el que trabajadores y trabajadoras y el pueblo pobre, recuperaron y pusieron a producir varias plantas de PDVSA, que la reacción proimperialista quería paralizar.
“Evo, los voy a llevar siempre conmigo, es un pedazo de Bolivia”, se jactaba Cristina mientras lucía su encaje de Christian Dior en el acto de acuerdo energético con el presidente de Bolivia. Evo le obsequió un juego de collar y aros de plata con engarces de bolivianita, una piedra preciosa única en el mundo, producto de la fusión de la amatista y el citrino.
Los jóvenes trabajadores del No Pasarán junto a compañeros y bandas de música independientes estamos organizando hace algún tiempo lo que hemos llamado “Red de Bandas Obreras”. Cada uno de nosotros, en nuestros lugares de trabajo, hemos conocido muchos jóvenes laburantes que intentan expresar todas sus vivencias, su sufrimiento, la explotación que vivimos a través de las letras.
Entrevistamos a Tomás, joven trabajador, militante del PTS y del No Pasarán, y a Agustín, quien fue Presidente del Centro de Estudiantes del “Cuba” y también militante del PTS y el NP, ambos detenidos en la represión a los trabajadores del casino el miércoles 30 de Enero.
Durante diciembre y enero, militantes del PTS y compañeros de los círculos marxistas, finalizamos un curso sobre teoría de la Revolución Permanente.
Con la presencia de un centenar de asistentes el 26 de enero se inauguró el centro cultural Oktubre en San Justo (La Matanza).