Desde arriba intentan imponer la danza de candidatos y ensayos de alianzas patronales que se postulan para las legislativas de octubre, incluso para el 2011 como Reutemann. Todos dicen pensar en “el largo plazo” y en el “pos-kirchnerismo, cuando, en realidad, ningún sector de la clase dominante puede asegurar algún futuro para el país en el marco de la crisis mundial.
Después de la numerosa marcha realizada el martes 6 en Buenos Aires en repudio de la masacre producida por el Estado de Israel en Gaza, muchas de las organizaciones que participamos nos reunimos en el Hotel Bauen para constituir un comité y planificar una campaña de solidaridad con el pueblo palestino.
La masacre en Gaza ya cobró más de 700 vidas y 3.000 heridos, entre mujeres, niños y ancianos completamente indefensos ante la maquinaria bélica más sofisticada, provista por el imperialismo norteamericano.
El ataque aéreo israelí sobre la Franja de Gaza se intensificó con una incursión terrestre desde el 3 de enero, que incluyó tanques y fuerzas de infantería con el objetivo de sitiar la ciudad de Gaza. El ataque terrestre se suma a los bombardeos continuos a la población que soporta una verdadera carnicería que ya suma 700 muertos y más de 3.000 heridos, de los cuales casi la mitad son mujeres y niños.
Miles de personas marcharon contra el ataque de Israel a la Franja de Gaza alrededor del mundo. Hubo importantes manifestaciones en París, Madrid, Berlín, Londres, Atenas, Roma y Yakarta (Indonesia). También se realizaron movilizaciones en países de Medio Oriente, como Líbano e Irán. Hubo protestas en Egipto, Estados Unidos, Canadá y en varios países de América Latina.
El martes 6 de enero, con más de 5.000 manifestantes, se realizó en Buenos Aires la segunda marcha contra la agresión del Estado terrorista de Israel sobre la Franja de Gaza.
Organización palestina fundada por la Hermandad Musulmana egipcia en diciembre de 1987 durante la primera Intifada. Su estrategia es establecer un Estado islámico en el conjunto del territorio histórico de Palestina, pronunciándose por la destrucción del Estado de Israel, aunque en los últimos años ha “flexibilizado” esta posición, reconociendo en distintas ocaciones al Estado sionista.
A un mes del asesinato del joven Alexis Grigoropoulos a manos de la policía griega en un barrio de Atenas, las protestas siguen ocupando las calles y la política griegas. Ni siquiera para las fiestas navideñas logran calmar los ánimos de los jóvenes, que en esta ocasión salieron a quemar árboles de navidad colocados por el gobierno como si no pasara nada.